Periodismo con babuchas
Después de contaros cómo escribo con los pies y de tanto rollo sobre el periodismo con botas, ayer hablaba con un amigo acerca de la conveniencia de ir buscando ya un patrocinador que me calce con unas botas o unas zapatillas majas, a cambio de publicidad en el blog y mi eterno agradecimiento.
Esta mañana he recibido en casa un paquete con un regalo: ¡unas babuchas kirguisas!
Me las ha mandado el cabraloca de Daniel Burgui, que pasó unos meses en Kirguistán, y me las ha mandado con el deseo de que me sirvan para escribir más reportajes. ¡Gracias, daniburgui, procuraré hacerles los honores debidos!
Ya que estamos. Se me olvidó comentarlo, pero tendríais que ver la tristeza de huevos duros, mejillones enlatados y barritas de cereales que llevo en las caminatas (el jamón no hace falta que sea de burro centroasiático, queridos lectores, queridas lectoras, me conformo con el de un cuto salmantino).
Y vista la hostilidad con la que algunos fashion victims atacáis mi indumentaria en general, tampoco os cortéis si veis alguna camisa elegante por ahí que me sirva para los siguientes diez años de conferencias, entrevistas y ceremonias.
Gracias de antebrazo.
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- Ander Izagirre - Me mandan herramientas para hacer periodismo: unas babuchas kirguisas http://t.co/D2DATT5i Las manda @caravinagre, claro.
- Ander Izagirre - Periodismo con babuchas: Después de contaros cómo escribo con los pies y de tanto rollo sobre el periodismo con ...…
- Daniel Burgui - Me mandan herramientas para hacer periodismo: unas babuchas kirguisas http://t.co/D2DATT5i Las manda @caravinagre, claro.
- Alimente a un escritor » Ander Izagirre · Blog y web personal - [...] cunda el trueque: podéis pagarme con un bocata de tortilla y una caña, con otro libro, con unas babuchas…
Yo lo que veo es que así, a ojo de buen cubero, esas preciosas babuchas kirguisas te quedan pequeñas. Más bien parecen de mi medida… ¿Cuela?
Tienes buen ojo. Pero me las guardaré por si alguna vez vuelvo a vivir una temporada sobre un glaciar y por lo que sea se tuercen las cosas y me tienen que amputar los dedos de los pies.
Y muuuuuuchas felicidades, Mòmo. 🙂
Estaría bien que las llevaras en este próximo viaje para que puedas usarlas en tus ratos de descanso, especialmente en los días de aclimatación en Bolivia.
Suerte y que disfrutes como siempre.
¡Feliz día en Barcelona!!
Me da miedo que las llamas del altiplano huelan a cabra kirguisa, se pongan celosas y territoriales y vengan a comerme los pies…
No sé yo si te veo vestido «de marca» y llenas tus solapas, pecheras y pantorrillas de publicidades varias, tal cual multiochomlista mediático. No estarías bien visto aunque fueras bien vestido. Agradece el detalle de Dani, que por algo se empieza.
Hombre, Santi, no te me pongas soviético. En las botas no racaneo y si algún fabricante quisiera adoptarme no diría que no. Desde el año pasado, cuando los montañeros me dieron un montón de ropa buenísima para ir con ellos, ahí ando, luciendo la cola de la ballena allá por donde voy, celebrando los éxitos del capitalismo.