Historico | febrero, 2012

Casete

29 Feb

Cassettes de La Onda Vaselina, banda sonora de mi infancia junto con Mecano, Sabina, Silvio, Urtz y Blur. Así he salido

 

Ahora que ya he dejado muy atrás la edad del pavo, que miro de frente al malote que me hacía bullying en clase cuando me lo cruzo por el barrio, que he aprendido bastante a reírme de mí misma, y que las burradas que me dicen los trolls convierten las burlas del insti en caricias, he decidido salir del armario. Me llamo June Fernández Casete. Sí, sí, Casete, como las cintas, pero con una ese y una te. Yo, que soy como un libro abierto, me guardo medio en secreto muy pocas cosas. Una de ellas es mi segundo apellido. Me ha parecido una faena, motivo constante de cachondeo, pero a día de hoy cada vez me gusta más: gracioso y con muchas posibilidades.

Que se lo digan si no a Ander, que desde que se enteró me ha dedicado bromas como “entonces, cuando se quedó embarazada de tí, tu madre estuvo en-cinta” o “qué buen apellido para una maqueta”. Ander se ha dado cuenta además de que yo soy ‘casetari’ y, por tanto, bien podría haber bautizado mi blog como ‘Mari Casetari’ o, directamente, ‘Mari Casete’. Y Maite me grita «Caseteee» en tono ‘Muchachada Nui’. Que duda cabe que si algún día me hacen algo similar a un Celebrities, mi apellido dará mucho juego.

Además, la gracia del apellido es que su significado varía de unas generaciones a otras. Saco este tema animada por Lucía, que me pasa por Facebook la noticia de que el cassette cumple 50 años (no he podido ver el vídeo aún porque escribo con mala conexión). Antes de su nacimiento, nuestro ilustre apellido era original, pero sin más implicaciones. Cuando aparecieron las cintas, mi bisabuelo, Ventura Casete Casete (sí, doble pletina, hijo de madre soltera), zapatero gallego que ya peinaba canas, dijo a sus hijos: “vaya por Dios, qué bajo hemos caído, que ya estamos de oferta”. Mi madre y mi tío fueron la primera generación en sufrir el apellido. Para cuando yo llegué a la adolescencia, el cassette ya estaba en riesgo de extinción: “ahora te tienes que pasar a cedé”, me decían. O a minidisc. Yo no lo tenía tan mal, porque la gente no se enteraba de mi segundo apellido más que el primer día de clase, cuando leían la lista con todos los nombres completos. Imagino que a mi prima, que lo tiene de primero, le han tocado más vaciladas. A su hermano pequeño, en cambio, el declive de este emblemático soporte le ha sentado bien. Apenas le toman el pelo, puesto que a sus compis de 2º de ESO, conectados al Spotify y el Ipod, eso del cassette les suena a prehistoria. (más…)

Cuerpos de feministas cubanas. Marilyn Solaya

24 Feb

Marilyn Solaya, realizadora

«Hay gente que no me perdona haber sido bella»

Marilyn Solaya, junto al cartel de uno de sus documentales, 'En el cuerpo equivocado'

Marilyn Solaya fue una de la actrices de ‘Fresa y chocolate’, la película que se cita siempre como punto de inflexión en el que se inició el largo camino hacia la normalización de la diversidad sexual en Cuba. Aunque se hiciera conocida como actriz, se formó en dirección, y ha orientado su carrera hacia la realización de documentales que siempre integran la perspectiva de género y el interés por la sexualidad. En ‘Mírame, mi amor’ denuncia el exhibicionismo masculino, tan habitual en los cines, parques y paseos de La Habana. Ahora se encuentra presentando ‘En el cuerpo equivocado’ en diversos festivales (se proyectó en la última edición de Zinegoak) una cinta que se acerca a la vida de Mavi, la primera transexual operada en Cuba, para reflexionar sobre cómo influyen los estereotipos sexistas en la construcción de la identidad de las personas trans. (más…)

Cuerpos de feministas cubanas. Isabel Moya

23 Feb

Una de las mecenas de mi proyecto cubano, Gisela, me propuso el siguiente tema:  cómo las feministas cubanas sienten sus cuerpos y los cambios corporales. También preguntaba qué discurso tienen las feministas hacia el papel que juega la vestimenta y la estética en la construcción de la feminidad, si asocian el ser feminista a una estética determinada… Me dediqué a hacerles esa pregunta y luego me di cuenta de que mis compañeras feministas cubanas presentan cuerpos de lo más diversos: blancos, negros, mestizos, gordos, flacos, quemados, recién paridos, en sillas de ruedas… He podido recoger experiencias dispares sobre cómo ser feminista les ha ayudado a aceptar su cuerpo o, por el contrario, cómo tener un cuerpo diferente al de la norma les ha acercado al feminismo. Empiezo esta serie con Isabel Moya Richard, directora de la Editorial de la Mujer de Cuba, quien además es experta en las representaciones de las mujeres en la prensa y la publicidad.

Isabel Moya, periodista

«El feminismo me ayudó a aceptar mi cuerpo, a sentirme feliz en él, aunque esté en silla de ruedas»


Foto tomada del blog del Instituto Internacional José Martí

 

¿Cómo ha influido el feminismo en la relación que tienes con tu cuerpo?

Yo tengo una discapacidad física, una enfermedad que me impide asimilar el calcio, por lo que tuve que usar aparatos para caminar hasta los 12 años. Después hubo que operarme las piernas, así que he tenido cicatrices. Yo diría que la propia representación del cuerpo me hizo acercarme al feminismo. En mi casa me criaron con mucho cariño y reforzaron mi autoestima. Tengo un hermano menor y nos criaron igual, sin lástima y sin sobreprotección. En mi casa naturalizaron que las personas son diferentes. Mi madre siempre hace un cuento: pasaba por la tele una novela, ‘Enrique de Lagardere’, cuyo protagonista se disfraza de un jorobado, Esopo. Todas las niñas querían ser la princesa, y todos los varones Enrique de Lagardere. Yo decía toda contenta: “¡Yo soy Esopo! ¡Yo soy Esopo!”, y mi madre lloraba, pero yo le digo que eso quiere decir que me quería como era.

Siempre fui un poco transgresora. No me ponía a intentar seguir lo que todo el mundo hacía porque yo ya era diferente. Tenía dos opciones: o sufría todo el tiempo o hacía de mi diferencia un motivo de orgullo, como el orgullo gay. Fui una protofeminista: no tenía ni idea de feminismo pero me sentía muy empoderada. Después caí en la revista Mujeres de pura casualidad y al principio me parecía que no tenía nada que hacer ahí. El verdadero periodismo me parecía el de política. Pero cuando empecé a hacer reportajes, a conocer la teoría de género y a feministas latinoamericanas, descubrí que eso era lo que había pensado siempre sin haberlo sistematizado. (más…)

Primer premio, por partida doble

20 Feb

En La Habana, un babalao me dijo: «Estás sentada encima de la fortuna, y no la ves». Unos días después me conecté a internet y encontré un email en el que se me notificaba que he ganado mi primer premio periodístico. Hasta hoy no podía hacerlo público. Lo del babalao es por empezar el post con algo de color, no me hagáis caso.

Pikara Magazine, la revista digital feminista que he puesto en marcha junto con Itziar Abad, Lucía Martínez Odriozola y Maite Asensio Lozano, publicó su primer reportaje el 18 de noviembre de 2010. Lo firmamos Paloma Migliaccio y yo, y arrancaba así:

¿Será niño o niña?

June Fernández y Paloma Migliaccio

El sistema sanitario decide en qué género vivirán los bebés que nacen con algún tipo de intersexualidad. Activistas e investigadoras debaten si la cirugía de asignación es necesaria para crecer en una sociedad binaria, o una forma de mutilación genital que atenta contra la autonomía sexual de quienes no encajan en las etiquetas “hombre” y “mujer”. La discusión esconde una pregunta de fondo: ¿es la intersexualidad una patología o una clara manifestación de la diversidad sexual?

Leer el artículo completo

El reportaje iba acompañado de las entrevistas a dos activistas que nacieron con una intersexualidad: Mauro Cabral y Gabriel Martín.

Pues bien, esos textos han recibido el galardón nacional del Premio de Periodismo de la Unión Europea ‘Juntos contra la discriminación’. Esto nos permite optar a uno de los tres premios que se entregarán entre los trabajos ganadores de los 27 concursos nacionales. (más…)

La generación USB

10 Feb

Me cuentan que Alexander, uno de los líderes del popular grupo de reguetón cubano Gente de Zona, se acostó con dos chicas en un hotel. Mientras él dormía, ellas le estuvieron grabando desnudo con el móvil, para probar después que realmente se habían montado un trío con nada más y nada menos que Alexander de Gente de Zona. A falta de Youtube, el vídeo corrió como la pólvora de celular en celular.

Una guagua cochambrosa avanza entre almendrones (los míticos carros americanos de los años cuarenta y cincuenta), en una carretera flanqueada por edificios coloniales semiderruidos. Una joven cubana que viaja en la guagua saca del bolso su blackberry. A mí me parece una escena propia de Regreso al Futuro, pero ese contraste de smartphones en un paisaje anclado en la mitad del siglo XX es constante en La Habana. «Mira, este móvil me lo ha mandado mi hijo desde España, es tactíl«, presume Mercedes ante su sobrino, que le responde mostrándole su Iphone.  (más…)

Tertulias blogueras nocturnas: hoy, el poliamor

8 Feb

¿Es factible que dos personas se pasen juntas 30 años sin amar ni querer acostarse con otras? Si pensáis que no, ¿cuál es la solución: aprender a gestionar la frustración, poner cuernos con más o menos alegría, o probar nuevos modelos de pareja diferentes a la monogamia? Mucha gente habitual de este blog pensará que la tercera (que no se diga que no somos progres). Nuestra sexóloga preferida, Mónica Quesada Juan, dedicó a este tema su último artículo para Pikara. Sin embargo, se limitaba a recomendar que no asumamos la monogamia por inercia, por considerarlo lo normal o natural, y que nos demos permiso para probar el pacto que nos permita crecer más, como pareja y como personas. Así es que yo dejé el siguiente comentario:

Sí, yo también creo que esto merece una segunda parte, porque el tema me parece super complejo. No creo que la cuestión sea sólo la genitalidad. En mi opinión, la cuestión es que el sexo también implica intimidad. En nuestra sociedad el encuentro sexual es, de hecho, una de las situaciones en las que más intimidad y afecto se comparte entre dos personas. Si fuera una cuestión de genitalidad, creo que lo llevaría mucho mejor que sabiendo que una relación sexual es mucho más.

Me interesa sobre todo profundizar en el tema de cómo se negocia la no monogamia, porque ahí también veo que el asunto es muy complejo. Por ejemplo, respecto a contarse o no las cosas. Yo soy una persona exageradamente comunicativa. Cuento todo lo que me pasa no sólo a mis eventuales parejas, sino a mis amistades. Si yo no le cuento el encuentro, de alguna forma parece que tiene más importancia de la que tiene. Y además supone mentir. “¿Qué hiciste ayer por la noche?” ¿Qué contestas a eso? No digamos ya cuando hay convivencia. Si el pacto es contárselo, habrá ocasiones en las que realmente no apetezca contarlo, que sea una experiencia que quieres guardarte para ti. ¿Y si no sólo ha sido sexo? ¿Y si estas atravesada por la emoción e ilusionada? ¿Cómo haces para compartirlo o para no compartirlo y que no se note?

A todo esto, desde el boom Paranoicas-Histéricas-Feminazis, mi Facebook está más animado que nunca. El otro día me dio por plantear un debate sobre ligoteo y machismo, y a lo tonto nos enfrascamos en tres hilos de conversación que rondan los 100 comentarios cada uno. Y en cada hilo sale algún nuevo tema sobre el que nos apetece debatir. El problema del FB es que no da opción al anonimato, y a mucha gente no le nace hablar de sus experiencias personales en una plataforma tan indiscreta. Así es que vamos a intentar mudar esta racha de tertulias animadas aquí, y así además quedarán recogidas para la posteridad:

¿Cómo véis esto de las parejas abiertas? ¿Lo habéis probado? ¿Cómo lo habéis gestionado (o lo gestionáis)? ¿Y la posibilidad de mantener relaciones de pareja simultáneas? ¿Alguna otra experiencia que queráis compartir: intercambio, tríos sentimentales-sexuales estables en el tiempo, etc.?

Periodismo en Cuba: lista de mecenas

7 Feb

Ainhoa Ispizua – Ainhoa – Ander Izagirre – Beatriz Gimeno – Brígida Ridruejo – Carles Guinart – Carmen Acero – Cuerdos de Atar – Diego M. Roig – Ekhi Belar – Fundación Iniciativa Social – G. Vilarinho – Gisela Bianchi – Glogour – J.A. Moral – José M. Osuna – Joseba Pando – Ianire Estébanez – Iñaki Mendizabal Elordi – Itxaso – Kasry – Laia Marqués – Lucía Martínez Odriozola – Luciano Busto – Lupita – Magapola – Maiteder – Make Irigoien Perurena – María- Marta – Marta Entrenomadas – Marta Nielisse – Miguel Martínez – Minerva – Mireia Gallardo Avellan- Mireia Martínez Mulero – Mogonal – Mujeres Imperfectas – Nendivei – Nere – Noé González Rodrigo – Norma Vázquez – Ritxar – Sancau – Sergio – Susana – Tebbel – Tina Simón – Txus Mungia – Xabier Mendiguren – Zigor Aldama

Son las 51 personas que han apoyado como mecenas a través del crowdfunding mi proyecto periodístico en Cuba. (más…)