Mujer: ¡atrévete!
22 Ago
No merece la pena, mujer, tu pasividad
No merece la pena, mujer, debes de actuar
No merece la pena, mujer, tu pasividad
No merece la pena, mujer, ármate
Es una letra de Ska-P que saca lo peor de mí. Anda, ¿debo actuar? ¡No se me había ocurrido! ¡Gracias por la idea!
Otra:
Mujer golpeada, no sirve de nada que sigas callada, mujer marcada, mujer maltratada, no te sometas, son tus hijos que te llaman
Esa es de La Mona Jiménez, con la colaboración de Manu Chao. Y luego está Patxi Andión, que cuenta que si él fuera mujer pasaría de los tíos chulos, de sujetadores y de pastillas. O sea, que lo haría super bien, mejor de lo que lo hago yo, después de años de militancia feminista.
Las he descubierto a raíz de pedir a la gente recomendaciones de canciones contra la violencia machista, para la lista de música Beldur Barik! que hemos empezado a crear. Ha sido fácil pensar en canciones compuestas por mujeres que llaman a romper el miedo y empoderarnos. Por ejemplo, Nanai de la Mala Rodríguez («Mírame a los ojos si me quieres matar, nananai, yo no te voy a dejar») o Por tí daría, de Hanna («Por tí daría la vida y ahora me di cuenta que no») y, la que más me gusta, Bellas, de Canteca de Macao («Quien bien te quiere te hará sufrir, ay yo no pienso de esa manera. Quien bien me quiere, me quiere libre y yo no sufro si soy libre a tu vera», os he dejado el vídeo arriba). Hablan en primera persona, sienten la violencia machista como algo que les afecta, pero que saben enfrentar. Predican con su propio ejemplo.
En cambio, las canciones que cantan los hombres se caracterizan por dirigirse a las mujeres y animarlas a que le echen valor y denuncien. Incluida la de Huecco (que se suena bastante últimamente y en cuyo videoclip ha participado todo el famoseo progre), aunque empatiza un poco más y trata de entender cómo se sienten las mujeres maltratadas, repite el mismo mensaje: «rompe tu jaula ya». Todos ellos transmiten paternalismo, condescendencia y superioridad: saben lo que las mujeres deberían hacer, y les cabrea que no lo hagan, se atreven a criticar su pasividad. No he encontrado canciones que se dirijan a los agresores, ni mucho menos en los que el cantante asuma sus micromachismos (por el contrario, Melendi pide al cielo que sepa comprender los ataques de celos que le entran). Además, muestran una visión estereotipada de la violencia machista, hablando de violencia física y ligándola al consumo de alcohol.
En 2010 Beldur Barik incluyó un concurso de expresiones artísticas contra la violencia machista, abierto a la participación de chicas y chicos. Por lo que me han contado sus impulsoras, las obras presentadas por chicos se caracterizaban por eso mismo, por dirigirse a la víctima y animarla. Ninguna de las obras interpelaba a los agresores ni apelaba a la responsabilidad de los hombres frente a la violencia machista.
Todo esto me ha recordado también a la actitud de muchos hombres de los movimientos sociales, estos que te dicen: «empodérate, compañera». Nos animan a que hablemos en público pero ni se les pasa por la cabeza que para que nosotras cojamos el megáfono conviene que ellos lo suelten de vez en cuando. Apoyan nuestro proceso de empoderamiento (bueno, menos cuando se sienten amenazados por él), pero ni se les pasa por la cabeza iniciar su proceso de desempoderamiento, de renuncia de sus privilegios por ser hombres.
No me malinterpretéis: me parece genial que a los hombres les preocupe la situación de las mujeres y que traten de apoyarnos. Pero esa es la parte fácil, la parte que no les lleva a revisarse, a cuestionar sus propias actitudes. La parte difícil es entender que la violencia machista no es eso de los hombres que pegan a sus mujeres, eso que nada tiene que ver con ellos. Las agresiones físicas son la punta del iceberg. Así lo explica Ander Izagirre en su artículo En los zapatos del asesino, escrito después de asistir a una conferencia del gran Miguel Lorente:
Pero el machismo no son sólo los estallidos. El machismo es un paisaje: un terreno amplio y común de desigualdades, en el que el poder y la autoridad de los ámbitos públicos sigue en manos abrumadoramente mayoritarias de hombres, y en el que muchas relaciones de pareja están marcadas por el dominio habitual del hombre sobre la mujer; ese es el paisaje en el que arraiga la violencia, más sutil o más brutal, física o psicológica, en el que encuentra justificaciones, un cierto amparo o una indiferencia que le deja hacer. Ese es el terreno abonado del que brotan, de repente, los estallidos.
Ojalá entendiéramos que ese terreno lo abonamos entre todos y todas. En ese artículo, Izagirre recordaba un dato muy preocupante que dio Lorente:
Y diría que el asunto de la indiferencia atañe especialmente a los hombres. Es significativo lo que ocurre con el 016, el teléfono confidencial para maltratadas: cuando la persona que llama para pedir ayuda no es la víctima, sino alguien de su entorno, en el 80% de los casos son amigas, madres, hijas, hermanas… Sólo una llamada de cada cinco la hacen hombres. O sea, que en general estamos a por uvas.
Mi compañera de Kazetarion Berdinsarea, Maite Asensio, da algunas ideas en este análisis publicado en Berria sobre lo que pueden hacer los hombres. Traduzco algunos fragmentos para quienes no sepáis euskera:
Para hacer frente a la violencia sexista, el empoderamiento de las mujeres resulta imprescindible (…). Pero a veces eso no es suficiente, y además también sería injusto: ¿dónde está la responsabilidad de los hombres? (…) Frente al machismo, la mayoría de hombres se consideran neutrales, ¿pero cuántos han han alzado la voz para decirle al de al lado que su comentario sexista sobre la falda de la compañera de trabajo es completamente inapropiado? ¿Cuántos dicen pese a ello que no pueden hacer nada contra la violencia sexista? La prevención hay que hacerla antes de que la violencia llegue a su nivel más intenso. Cuando el amigo de la cuadrilla ignora los gestos de alejamiento de la mujer con la que intenta ligar y la agarra de la cintura una y otra vez. (…) Desde la confianza que da la amistad, desde tu posición de referente para él, dile: «Te estás pasando, la chica ha dicho que no y tú lo tienes que respetar».
Pues ya que pones como ejemplo de machista a Melendi, te recomiendo que busques la letra de su canción «Hasta que la muerte los separe». A veces los prejuicios no nos dejan ver más allá…
Te dejo un trocito:
«Marido y mujer hasta que la muerte los separe
Y ella espera llegue de su mano
Porque sólo así podrá devolverle parte del daño.
Porque fue a la ley y la ley le dio del otro lao’
No son suficientes los morao’s
Ni segar al cero su amor sincero pa’ condenarlo»
Gracias, Cristina, porque el ejemplo que pones va como anillo al dedo a lo que vengo diciendo. Habla de violencia física de terceras personas, pero cuando le toca hablar de sus sentimientos, pide comprensión por sus ataques de celos. Pero vaya, dios (o quien sea) me libre de discutir con una fan.
Q tal! estaba leyendo este artículo de opinión. Y estoy de acuerdo con varias de las cosas que se dicen. Aunque me gustaría no meter a todos esos artistas en un mismo saco. Primeramente Melendi, de todos es conocido que su forma de ser..chirría un poco. Es verdad. Aunque me gustaría salvar a Ska-p por su canción. En el fondo creo que va dirigida solamente a aquellas mujeres maltratadas que dudan de dar el paso a denunciarlo. Sus letras, en todos sus temas, pretenden movilizar a la gente. En otras canciones como «Lucrecia» o «Eres Un@ m@s» se puede entender por dónde van.
:-p solo eso! jeje
saludos señoritos y señoritas 🙂
Aupa,
Preguntas aunque no de manera explicita por canciones que se dirigen a los agresores. Aqui tienes una de «Los del Gas» con la colaboración del Drogas de Barricada…
http://www.youtube.com/watch?v=b4qOF5GZVJs
Me gusta que es una cancion cantada (y entiendo que escrita, que no siempre es lo mismo) por hombres y que transmite la rabia de quienes ven atónitos la cruda e inexplicable realidad de la violencia física dentro de la pareja.
No me gusta (esto me estaba saliendo segun escribo) que se mueve mucho dentro del «paradigma» de la debilidad femenina, que no propone alternativas ni es constructiva, que no trata el empoderamiento y que transmite el mismo juego de roles que critica: ese «pegame a mi» la saca a «ella» automaticamente de la solucion… aparte del propio hecho del círculo vicioso de la violencia…
Lo dicho… me gusta en el sentido de la expresión de rabia masculina ante el hecho en si… si la analizamos en profundida entiendo que puede ser muy mejorable pero bueno… ya que preguntabas…
Esto a botepronto… si encuentro alguna más, ya te la cuelgo por aqui… 😉
Ondo ibili ta ondo pasa aste nagusian!
Mikel, tú lo has dicho todo. Añadiría de lo positivo el retrato que hace del tío, como un ciudadano ejemplar, porque rompe así con la idea de que los maltratadores son marginales, o super agresivos siempre, o delincuentes, etc. Pero para mí no aprueba porque la idea es desmontar la masculinidad tradicional, y eso de «pégame a mí» tiene que ver con esas heroicidades cutres que nada aportan a la lucha por la igualdad. Y sí, eso de que la pegas a ella porque es más débil, me pone de los nervios. Aunque estamos un poco exigentes con la lista Beldur Barik, seguro que estos otros ejemplos nos sirven para algún taller, para debatir.
Eskerrik asko eta gora marijaia!
Que tal, llegué al blog buscando información reciente de Manu Chao.
Te cuento que soy estudiante de Comunicación Social y años atrás con mis compañeros hicimos un documental sobre la violencia de género y para la musicalización del mismo utilizamos el tema de la Mona Gimenez con Manu Chao, pero también incluimos una canción de Salida Nula (banda madrileña) que se llama «Quién te llena» y también de Reincidentes «Ay dolor!». De ésta última me quedo con la frase «Por fin esta historia ya terminó, Dolores cambió su nombre por Libertad»
Bueno, muy bueno el blog y lo seguiré de cerca. Un saludo desde Argentina
Gracias por las referencias, Dani. Buscaré «Quién te llena», porque no la conozco. Saludos desde Bilbao.
Pues es una lástima, June, porque a mi me encanta «discutir» («examinar atenta y particularmente una materia»)… Soy profesora de lengua y literatura, filóloga (en 3 especialidades) y una gran «fan» (parece que te gusta la palabra) de cualquier tema relacionado con los derechos de la mujer. Pero por lo que se ve, y por segunda vez, tus prejuicios te lo impiden. Saludos 😉
Afearme por mis supuestos prejuicios todo el rato no es la mejor forma de debatir. Si te gusta debatir, pues debate sobre el tema. No veo qué tiene de incompatible ser fan de Melendi con tener tres especialidades. Como si todas las fans fueran peluqueras. Tú le pones la carga negativa. Y no era un prejuicio sino una observación, porque tu comentario era propio de una fan incondicional de Melendi (ya que te limitabas a defenderle en vez de opinar sobre el tema). Saludos. 🙂
Muy acertada tu reflexión y totalmente de acuerdo.
La canción Txori Txori de Mikel Laboa(http://www.youtube.com/watch?v=6O3HTqa7l3A&feature=player_embedded#!)habla por sí misma:
‘Hegoak ebaki banizkio
nerea izango zen,
ez zuen aldegingo.
Bainan, honela
ez zen gehiago txoria izango
eta nik…
txoria nuen maite.’
‘Si le hubiera cortado las alas
habría sido mío,
no habria escapado.
Pero así,
habría dejado de ser pájaro.
Y yo…
yo lo que amaba era un pájaro.’
Gran ejemplo, Mónica. Efectivamente, esa canción de Mikel Laboa es de libro: está hablando de cómo se siente él respecto a la persona amada, y que antepone respetar su libertad y aceptarle como es, incluso a costa de «perderla». Podría haber intentado someterla pero no lo hizo. Y es del año catapún.
Un artista Mikel Laboa. Ya hace algún tiempo me cogí un rebote por un dicho que corría por el facebook:
Mientras le gritas a tu mujer hay un hombre deseando hablarle al oido… Mientras humillas, ofendes, insultas y degradas a tu mujer hay un hombre cortejandola y recordandole que es una gran mujer…. Mientras violentas a tu mujer hay hombre deseando hacerle el amor…. Mientras haces llorar a tu mujer, hay un hombre que le roba sonrisas.» Pega esto en tu muro, en protesta contra la violencia hacia la Mujer
Cada vez que lo leía, me encrespaba el trato de objeto que recibía el papel de la mujer. La víctima a la que hay que salvar. Y no sólo eso, sino que el mensaje se basaba no en el respeto hacia otro ser humano, sino el miedo de que te lo quitaran. De hecho hice mi propia versión:
Mientras le gritas a tu mujer, ella te va queriendo un poco menos … Mientras humillas, ofendes, insultas y degradas a tu mujer, ella se va alejando… Mientras violentas a tu mujer, ella ya está pensando que no mereces la pena…. Y todo ello sin necesidad de convertirse en un objeto para otro hombre. Pega esto en tu muro, en protesta contra la violencia hacia la Mujer.
Que ya esta bien de ser cosas.
Yo discrepo de un montó de cosas que se han dicho aquí.
Me da una pereza enorme poner a explicarme. Sólo diré que a Melendi no le convertiría en algo parecido a un músico decente ni la causa más noble del mundo, y que entre el rock&roll de toda la vida y las buenas intenciones -o intenciones comerciales disfrazadas de buenas intenciones- me quedo con el primero. Aquí dejo, supongo que para escándalo de algunos, una canción que, para mí es de las más bellas de amor escritas en castellano.
http://www.youtube.com/watch?v=KWKqL3eN3Zs&feature=related
Saludos, June
Pues yo estoy bastante de acuerdo contigo, Alberto. Claro que me irritan los artistas que usan este tema para hacer su «canción comprometida» y quedar de puta madre. Eso es precisamente lo que critico en este post, porque en cuanto se relajan, les sale el machismo por todos los poros. En cambio, dudo que Mikel Laboa pensase al componer Txoria Txori: «Buah, se me va a recordar por los siglos de los siglos como un hombre por la igualdad». Y por eso es la única que me convence de las canciones escritas por hombres que hemos citado. Yo no defiendo que los artistas cumplan con su cuota de canciones comprometidas, sino que confío en que alguno se sensibilice contra la violencia y eso se traduzca en letras que transmiten otras formas de amar, porque él sienta que existen esas otras formas de amar, y molan. No por ser el sucesor de Bebe.
No vamos a defenestrar a un buen músico porque reproduzca el ideal del amor romántico. No soy de las que llama a hacer boicot a Sabina por machista (por poner un ejemplo). Otra cosa es que a la hora de juzgar a un letrista, tengo en cuenta los valores que transmite y lo que quiere contar.
Por último, el contexto el que he escrito este post es la búsqueda de canciones que sirvan para trabajar con jóvenes sobre igualdad. Yo puedo disfrutar con una canción que dice «están tan buenas esas virgencitas que lo que sudan es agua bendita». Pero me parece bien que las jóvenes se den cuenta de lo que están cantando cuando berrean «It’s allright ‘cause I love the way it hurts», que les parezca una letra preocupante en vez de la más romántica del mundo, y que encuentren otros referentes que les sirvan para suspirar sin que les estén diciendo que mola que un tío las machaque.
La obligación del músico es hacer canciones inmortales que nos acompañen en la vida, nos hagan sentirnos menos solos y a poder ser, nos sobrevivan, aunque éstas no nos hagan necesariamente mejores personas. Para eso ya están la escuela, la familia, la democracia o lo que quieras poner en la casilla correspondiente.
Lo mismo vale para cualquier otro trabajo de creación artística. Si no, ya podemos cargarnos el tango, el fado, el flamenco, la bossa nova, la rumba suburbial, el r&r, el blues y todo lo que pillemos por delante. Y en literatura, cine o artes plásticas, lo mismo.
Si te sale una canción de denuncia contra alguna injusticia, estupendo y más que estupendo, pero no hace falta que Melendi o Bebe nos evangelicen, por favor. O sea, que estoy de acuerdo con lo de Laboa. 🙂
Saludos
Mientras fregaba me he puesto a tararear una canción de Alaska y Dinarama, y me he dado cuenta de las barbaridades que decía. Habla de una mujer que ha sido engañada y que decide vengarse atropellando a su pareja, para arreglarlo no se arrepiente sino todo lo contrario:
«No me arrepiento.
Volvería a hacerlo, son los celos.»
La letra: http://www.quedeletras.com/letra-cancion-como-pudiste-hacerme-esto-a-mi-bajar-67828/disco-deseo-carnal/alaska-dinarama-como-pudiste-hacerme-esto-a-mi.html
El video: http://www.youtube.com/watch?v=TPWHaDUwpz4
Es increíble cómo cambia la sensibilidad hacia ciertos temas en relativamente poco tiempo.
Ahora que releo la letra no me queda claro si la mujer atropella a su pareja o a la amante de su pareja, la cosa va empeorando.
Vaya, me acaban de pasar una canción de una rapera colombiana, Diana Avella, que en principio tiene buena pinta, pero da también para bastante debate:
http://www.youtube.com/watch?v=50mRHKU_WXU
Se titula «Nací mujer», tiene mucha crítica y me gusta practicamente toda la canción, hasta que habla de los machos «y con amor mejorarlos»… enfin, ahí me chirría un rato…
A ver qué os parece!
Y luego otra más, que va a confirmar muchas de las cosas que dices en el post y se podría decir promueve la violencia (aunque también la autodefensa), pero enfin, en su día me sacó mi parte más punki. Aquí la dejo porque da también para debate.
Def Con Dos – Agrupación de Mujeres Violentas:
http://www.youtube.com/watch?v=Sst4orp8BYQ