¿Cómo no me di cuenta?
Estos días me he dado cuenta de que la vorágine comercial nos tiene comidos el cerebro y parte del cerebelo. He tenido que esperar a que se produjera la triste noticia de la muerte de Antonio Vega para zambullirme -tan solo medio cuerpo- en su vida y sobre todo en su obra. Y la verdad es que me topé con un tesoro creativo deslumbrante. Canciones extraordinarias y muy poco escuchadas, por lo menos por mí. Mea culpa.
Mucho mejor que quién os mortifica, lo explicaba hoy el escritor Agustín Fernández Mallo en su tributo Su ‘escala real’. Un círculo perfecto. Mientras unos juntamos palabras, Agustín escribe. Y Antonio Vega componía con todas las letras.
Para que los incrédulos reparéis en lo que os digo, no tenéis más que escuchar el siguiente tema. Un lujo…
Cita postuaria: «La vida es como una leyenda: no importa que sea larga, sino que esté bien narrada». (Lucio Anneo Séneca, 2 AC-65)