Chuleando a Bruselas… y a toda España.

La señora Salgado, por orden directa de Rodriguez Zapatero ha dado otra prueba de incompetencia acompañada por su proverbial soberbia, a la que estamos ya acostumbrados, cuando se mandó a Bruselas ante el ultimátum para la reforma de las pensiones dada la situación de la economia española y a las escandalosas cifras de déficit público que no ha llevado el gobierno socialista. En cuatro horas cambió el plazo de cotización de 20 a 25 años, sin informar al Pacto de Toledo ni al Parlamento,  cuando el documento ya estaba en Bruselas para su examen, mientras se decidía la intervención económica de la Comunidad de Grecia. España con su importancia dentro la Comunidad y el peligro que representa para su estabilidad, va a ser la siguiente nación intervenida.

Por lo que se deduce se pretendía parar las exigencias comunitarias que ya han dado un ultimatum para su intervención de la politica económica con un plan que contenía toda clase de intenciones y generalidades sin ninguna base y probablemente sin estudio previo ninguno, con el fin de intentar disimular la caótica situación basada en el despilfarro y falta de medidas para reanimar la economía. Han conseguido incluso poner enfrente a los sindicatos, que hasta ahora eran quienes sustentaban este disparate.

El bochornoso espectáculo que está dando el Gobierno de Zapatero con sus vaivenes y falta de transparencia en un asunto tan serio como el de las pensiones tampoco parece tener límites. Durante años, y frente a quienes alertaban de la insostenibilidad del actual sistema de pensiones, el Gobierno de Zapatero presentaba su irresponsable inmovilismo como si de una protección a los «derechos sociales» se tratara. Hace unos días, sin embargo, Zapatero nos anunciaba su propósito de elevar forzosamente la edad de jubilación de los 65 a los 67 años como forma de garantizar el futuro de las pensiones.

Lo mas grave es que no se informe con transparencia a las demás fuerzas políticas de qué es lo que quiere hacer y, en su lugar, se dedique a dar palos de ciego, para intranquilidad de los pensionistas presentes y futuros. Ya no hay ninguna duda que el Gobierno intenta o bien engañar a la Comisión Europea tranquilizándola con medidas que luego no va a tener el coraje de tomar, o bien engañar a los españoles haciéndoles creer que estas medidas son sólo «ejemplos» de los que nos podemos olvidar, cuando en realidad sí los va a llevar a la práctica. Conociendo a Zapatero, no es de extrañar que trate de engañar a todo el mundo.

Mientras Zapatero está en Washington rezando y desayunando con Obama en un viaje inútil y en contra de sus principios, con tal de sacarse una foto póstuma para su album de recuerdos. Espero que sus oraciones consigan EL MILAGRO, que es lo único que se puede apelar dada la gravedad de la situación. A su vuelta se va a encontrar con el pastel. Espero que tome la decisión acertada que sería su DIMISIÓN o en todo caso refrendar su liderazgo ante las urnas cuanto antes.

*FUENTE.- Xavier Carrió http://veintidos3.spaces.live.com/

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