(PD).- A Mariano Rajoy le están lloviendo palos por todos los lados. Para unos ha renovado mucho, para otros poco… Además, el grupo de los que piden la cabeza de Rajoy tiene un novio socio: Pepiño Blanco. El Secretario de Organización del PSOE mete el pico en casa ajena y asegura que lo que está haciendo el PP es todo falso. Asegura no es verdad que Rajoy fuera «rehén de los pérfidos Acebes y Zaplana, a la vez que esclavo de radiopredicadores sin escrúpulos. No, no y mil veces no«.
Tiene Rajoy el mundo político alborotado. Con La COPE y El Mundo, con Federico y Pedrojota, liderando la revuelta, son potentes las voces que piden a Mariano Rajoy que haga las maletas y no moleste más.
El locutor de La Mañana ha reiterado como argumento sin cesar que los medios menos afines al PP ha saludado con alborozo el nombramiento de Soraya Sáenz de Santamaría, y como ellos no quieren nada bueno para el PP… Pepiño pide a Mariano Rajoy que la renovación empieza por marcharse él mismo a casa, ergo…
«Pocos días después de perder las elecciones del 9 de marzo, Mariano Rajoy explicitó su decisión de continuar al frente del Partido Popular. Lo hizo aclarando que “esta vez” conformaría su propio equipo en la dirección del partido. Bonita declaración si viniera de un recién llegado a este mundo de la política, pero difícil de entender cuando parte de una persona que además de pasar siete años en los gobiernos de Aznar, lleva otros cinco años como supuesto líder del PP y se ha presentado dos veces, sin éxito, como candidato a la presidencia del Gobierno».
Es Pepiño en su blog el que ha entrado a trapo en el gallinero que hay montado en Génova 13.
«He querido recordar este episodio porque ahora estamos asistiendo al segundo capítulo de una renovación que tiene como único objetivo el de seguir igual, el de que nada cambie.
Rajoy ha situado a caras jóvenes y nuevas al frente del grupo parlamentario. Una vez más una buena decisión si partiera de un recién nombrado líder que encabeza un nuevo proyecto».
El Secretario de Organización del PSOE, mano derecha de Zapatero, dice más:
«Yo nunca me he creído esa historia tan extendida por los mentideros políticos de Madrid que describía a Rajoy como un buen hombre que era rehén de los pérfidos Acebes y Zaplana, a la vez que esclavo de radiopredicadores sin escrúpulos. No, no y mil veces no».
A su estilo, seguidamente, recala en el insulto:
«Rajoy ha sido siempre el más conservador y el más radical de los dirigentes del Partido Popular de la crispación. Él no ha consentido, no; él ha ordenado que el discurso del PP fuera como fue en temas como el 11-M, el terrorismo o la política territorial. Muchos españoles quizás no lo sepan, pero los pocos consensos que hemos alcanzado en la pasada legislatura entre el PSOE y el PP se han conseguido a pesar del criterio de Mariano Rajoy.
Rajoy es el PP de la crispación y por eso ha ascendido a los altares parlamentarios a los jóvenes que le escribían aquellos discursos incendiarios en los que los insultos al presidente del Gobierno se contaban por decenas».
Y, uniéndose a los que no se creen que llegan nuevos tiempos para el Partido Popular, asegura:
«Eso es lo que ofrece Rajoy, una falsa renovación porque él se queda y él precisamente él es quien representa lo más antiguo, lo más radical, lo más crispador y lo más ultraconservador que ha tenido el Partido Popular durante los últimos cuatro años».
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FUENTE: PeriodistaDigital.com
