Cuando se cumple un año del atentado en Barajas, después del ignorante balance del presidente Rodríguez, solo cabe decir que las andanzas del Gobierno con ETA han sido desvergonzadas, impropias de un Gobierno democrático y propias de un lamentable desconocimiento del terrorismo vasco. Sí, como suena, por mucho permiso y consentimiento que el Parlamento otorgara para negociar con la banda asesina.
Dado el mal asesoramiento recibido por Rodríguez, hoy los terroristas están sentados en las instituciones, con el agravante de que la Fiscalía General del Estado no supo ver la permanente ayuda y el apoyo que ANV brindaba a ETA. Si el Gobierno Rodríguez, la Fiscalía y Garzón facilitaron que ANV llegara a las instituciones, también allanaron el camino para que manejaran documentación que afectaba a la ciudadanía y controlaran lo que nunca debió estar a su alcance.
A ese control hay que añadir sueldos que cobran del contribuyente y de las propias víctimas. En muchos casos sueldos desorbitados cuyo último destino es ETA. O si lo desean más claro: las instituciones donde está ANV contribuyen a las arcas de ETA, del mismo modo que lo hacen los empresarios que pagan impuesto revolucionario. Y del mismo modo que los pequeños comerciantes pagan a Askatasuna y Etxerat el aguinaldo o contribución destinada a ayudar al desplazamiento de las familias que van a visitar a sus presos fuera de Vascongadas.
¿Más claro? Pues bien: Acción Nacionalista Vasca actúa como mediadora en el citado aguinaldo. ¿Desean mayor claridad? ANV recoge los sobres con el aguinaldo en su interior y los canaliza a las asociaciones que defienden a los presos etarras. ¿Más claro aún? Puedo prometer y prometo que ANV también es ETA, forma parte de su entramado y de sus entrañas, como lo forman las citadas asociaciones pro presos etarras.
Hace dos años que el Ejecutivo y la Fiscalía tienen a su disposición ese razonamiento; pero Garzón seguía defendiendo que esas organizaciones nada tenían que ver con el entorno abertzale. Parece que ahora ha ‘cambiado el rabo’. A la vista de todos los datos existente, la ilegalización de ANV no puede esperar más tiempo, salvo que la ignorancia siga siendo compañera del ejecutivo.
A muchos analistas se nos ha acusado sin razón, injuriado y puesto en el punto de mira por asegurar hace muchos meses que ANV y PCTV formaban parte del entramado de ETA. Ni nos convencieron en su día las argucias del Ejecutivo de Rodríguez, ni las triquiñuelas de la Fiscalía General del Estado.
Hoy empiezan a ‘caer del burro’ muchos incautos, como si hubieran descubierto lo que hace tiempo descubrimos muchos analistas, investigadores y periodistas. Llega tarde Garzón. Llega muy tarde la Fiscalía y, con toda su ignorancia a cuestas, llega tarde el Gobierno de Rodríguez. Bien es verdad que Alfredo Pérez Rubalcaba estaba esperando al resto del Gobierno a la vuelta de la esquina, pues conocía de antemano la realidad de ANV.
Ahora se acercan las elecciones y al Gobierno le interesa dar un golpe de efecto y hacer ver a la ciudadanía que ANV, Batasuna y el PCTV (EHAK) forman parte de las entrañas y del ser de ETA. Para ello han recurrido al ¿descubrimiento? de una vieja cuenta bancaria compartida, en la que todos metían mano, se engrosaba con la extorsión y se disponía de ella para gastos del entorno abertzale.
Muchos, como ha quedado dicho, no nos hemos cansado de decir que eran primos-hermanos. Pero solo el Gobierno era quien no se enteraba. No le interesaba enterarse o pretendía justificar la negociación; aunque más bien creemos que su intención era iniciar una segunda vuelta de estupideces con la banda asesina; es decir, volver a la negociación tan pronto se dieran las condiciones para ello.
El Gobierno de Rodríguez ha perdido el tiempo en cuanto a la negociación de ANV. Hace dos años todo hubiera sido mucho más fácil. Mark Twain solía decir que “el hombre que tiene una idea será considerado un loco hasta que ésta haya imperado”. El tiempo nos ha dado la razón, pero hemos tenido que soportar el insulto y la humillación en medios diversos por decir hace dos años lo que hoy dice el insulso Gobierno de Rodríguez.
Hoy huelen a tongo las manifestaciones del Gobierno, como tongo son muchos otros temas en los que el equipo de Rodríguez interviene: desde la línea ferroviaria Madrid-Valladolid del AVE, pasando por la inmigración, la vivienda, ley de dependencia, política exterior o educación para ciudadanía, hasta llegar a la caótica planificación de las infraestructuras de ‘Maleni’ Álvarez, por citar algunos.