Archivo diario: 21 enero, 2007

PNV apoya a Batasuna

prd4.JPG Jesús Salamanca Alonso

      Cada vez existen indicios más que suficientes para pensar que el PNV y EA no trabajan por lograr la derrota de ETA; es más, ni siquiera desean esa derrota. Pero vamos, incluso más lejos, hay otros colectivos a quienes tampoco les interesa la desaparición de la banda. Estamos comprobando que EHAK no solo no se ha puesto el mono de trabajo, sino que se ha negado a condenar los atentados de la banda asesina. Justo es resaltar que EHAK-PCTV fue legalizada como partido siendo ministro del Interior Ángel Acebes.

      Haika, Segi y Jarrai son ETA. Hay indicios más que suficientes para asegurar que EHAK-PCTV también lo es. El presidente del Gobierno no puede seguir haciendo el ridículo por más tiempo. ETA mata, extorsiona y alienta a sus cachorros, por lo que Rodríguez Zapatero debe eliminar cualquier sintonía con ella y con los colaboradores que sustentan a la banda.

      Es manifiesto que nuestro presidente ha demostrado con creces su cobardía y su ridícula gestión, pero debe reflexionar seriamente sobre la ilegalización del Partido Comunista de las Tierras Vascas. Al igual que está obligado a desmarcarse de sus socios del PNV y de EA que, sin ningún rubor y con pleno ‘animus jocandi’, están deseando negociar con los terroristas. Los partidos de corte nacionalista no buscan soluciones. No les interesan las soluciones para su comunidad autónoma (‘animus jodiendi’). Por el contrario, sí pretenden seguir en el ‘candelero’, salir en los medios de comunicación y no volver a estar olvidados, como lo han estado en los últimos meses, donde todo el protagonismo se lo ha llevado ETA y el Gobierno central.

      En breve espacio de tiempo, Rodríguez Zapatero deberá atenerse a la vigencia de la ley por las Libertades y contra el Terrorismo, con el fin de que Batasuna no continúe burlándose de la ley. El objetivo Batasuno es acudir a las elecciones forales y municipales; el primer paso ya está dado, y lo ha hecho con el apoyo del PNV y de la Diputación Foral de Vizcaya. Batasuna ya ha presentado su propuesta electoral. El órdago está echado. Una vez más, el PNV llega hasta el milímetro antes de saltar la raya de la decencia y la elegancia política. Y el Gobierno central continúa a un paso de su segundo ridículo espectacular. Con socios y amigos como el PNV, no precisa enemigos: si monta un circo, tiene garantizado el encogimiento de los elefantes.

Cantera juvenil de terrorismo

prd4.JPG Jesús Salamanca Alonso

       ¡Ya era hora! Por fin la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo se ha puesto de ‘tiros largos’. Ha dado en el clavo. Ni hay duda ahora, ni la había antes; pero ciertas instancias precisaban tiempo e información para no hacer un ridículo como el del presidente Zapatero.

       Solo mirando hacia otro lado se puede pensar que los colectivos juveniles abertzales — Jarrai, Haika y Segi — no forman parte de ETA. Con la cantidad de información existente desde hace años, imágenes incluidas, la ciudadanía no entiende que aún haya dos magistrados que alberguen dudas o miedo, por lo que habrá que estudiar con detenimiento sus votos particulares.

       Hay que conocer el mundo abertzale para no entender ciertas medidas judiciales. Hace tiempo que existía la certeza jurídica de que quienes quemaban autobuses en el País Vasco y organizaban algaradas eran terroristas. Y los tres colectivos juveniles son efectivamente terroristas. Por una vez, Mariano Rajoy sí tiene razón al incidir en que esa resolución judicial es un certero camino para derrotar a la banda ETA.

       Poco a poco el entramado etarra se va desmontando. En las provincias vascongadas se considera ‘apestados’ a los aprendices de terrorista y de futuros dirigentes de la banda. Solo la vía policial y judicial puede acabar con la represión que la siniestra abertzale ejerce sobre la sociedad vasca, su incontrolada violencia y la difusión de negativas influencias en numerosos ámbitos sociales.

       ETA y todo su entorno llevan muchos años confundiendo a la sociedad vasca. Su abanico de apariencias solo ha generado miedo, odio, pérdida de inversiones y abundante emigración laboral. Ni representa a la sociedad, ni la va a representar nunca. Hoy, en el conjunto de las provincias vascas, se duda de casi todo cuanto cobija al entorno radical: lo mismo se presentan bajo la etiqueta de un grupo de comunicación, una entidad ecologista, una organización no gubernamental, un grupo cultural, una entidad benéfica, una asociación por la paz y la concordia o un colectivo para la alfabetización y la educación de personas adultas.

       Con sentencias como la de la Sala de lo Penal del tribunal Supremo la sociedad civil se rearma de moral e incrementa su confianza en el poder judicial. De la misma forma que con actitudes como la de Eusko Alkartasuna y PNV se observa una actitud cobarde y mediocre, es evidente que a ambas formaciones no les interesa el fin de ETA y de todo su montaje. Exagerando un poco, no faltan quienes entienden que hasta el PNV y EA son otro vulgar entramado acostumbrado a convivir con la escoria terrorista. ¿Acaso EA no es una escisión del PNV, desde que en 1986 lo fundara Carlos Garaikoetxea? ¿Acaso ETA no nació en el seno del PNV? Hoy se puede afirmar sin temor a equivocarse que el Partido Nacionalista Vasco es la nodriza de todo lo negativo acaecido en el seno de las provincias vascas.