Archivo diario: 20 enero, 2007

Rosa Valdeón: 'Joya de la Corona'

prd4.JPG Jesús Salamanca Alonso

Llegó en silencio y con ese mismo sigilo quiere Juan Vicente Herrera que se vaya a ejercer de alcaldesa a Zamora. Joven, trabajadora hasta más no poder, con sobrada capacidad para formar equipos, licenciada en Medicina y Cirugía por la Universidad de Salamanca y brillante currículum. Esta toresana del Cuerpo de Inspectores Médicos de Sanidad ha logrado cautivar a los leoneses y castellanos. Se le conoce como la ‘Joya de la Corona’ y sin duda lo es. La torpeza de Juan Vicente Herrera va a cometer el tremendo error de privarnos de ella en la próxima legislatura.

¡Qué malos asesores tiene Juan Vicente Herrera! La labor de Rosa Valdeón Santiago, como Consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, está siendo de premio, nunca de castigo. Herrera debe recapacitar y hacer una nueva consulta entre sus fieles, aunque cada vez van siendo menos: no es ético que se prive a los castellanos y leoneses de una buena gestora. Si al final aterriza en la alcaldía de Zamora será el premio gordo para los zamoranos, pero un fuerte castigo para la ciudadanía de la comunidad.

Por una vez, el ejecutivo de Castilla y León puede presumir de talante con la consejera. En esta cuestión, el presidente Rodríguez Zapatero es un aficionado al lado de Rosa Valdeón. Desde la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades ha logrado formar un equipo capaz de conocer las inquietudes y necesidades de las familias y de los sectores más desfavorecidos. Ni un solo proyecto sin cumplir, ni una sola necesidad sin atender, múltiples ayudas y, lo que más llena de satisfacción, el elogio de la oposición y de la ciudadanía.

Valdeón ha sabido enfocar la realidad y se ha coordinado con el cielo y la tierra. Se planificaron cinco mil plazas de educación infantil y se han superado con creces, las ayudas y la atención a las familias han sido dignas de elogio y reconocimiento, las medidas para conciliar familia y trabajo han aparecido en el BOCyL como hongos en días lluviosos, el programa ‘Crecemos’ se ha extendido por toda la comunidad. No ha habido Diputación o Ayuntamiento donde su labor no se haya notado.

Esta mujer, elegante en el más extenso sentido de la palabra, ha logrado una coordinación entre varias consejerías que nunca se había visto por estos lares. Hasta con la Consejería de Educación — y mira que lo hacen difícil en esta Consejería -– ha triunfado en la campaña por fomentar la FP. La campaña “Profesión sin Género” es un ejemplo a favor de la igualdad. Hoy la mujer debe saber elegir ante una oferta amplia y los ciclos formativos son una posibilidad importante para la promoción profesional.

La consejera Valdeón Santiago ha acreditado su saber hacer. El trabajo bien hecho es un don y esta mujer lo tiene. Por eso quiero elevar mi protesta contra la errónea decisión y la permanente impertinencia de Juan Vicente Herrera, con la esperanza de que salga de su ‘ceguera’ y no deje de lado a la ‘Joya de la Corona’. No siempre el progreso consiste en el cambio. El presidente Herrera debería saber que la ignorancia no es no saber, sino no querer saber.

rosavaldeon.JPG Rosa Valdeón, Consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades

Elegancia de Grande-Marlaska

prd4.JPG Jesús Salamanca

Nunca hemos entendido los regalos del presidente a Batasuna y al entorno etarra. La aceptación y el beneplácito de José Luís Rodríguez Zapatero a la entrevista entre el líder del PSE-PSOE y el de Batasuna fue una prueba de asesoramiento ineficaz y trasnochado. Por otra parte, ha llamado la atención la coincidencia de fechas: reunión con el entorno de ETA y regreso a la judicatura del mal llamado “juez estrella”.

Ese regreso ha generado expectación y preocupación. Es un error vulgar buscar el aplauso cuando de terrorismo se trata. En las democracias serias, la Justicia no pierde el tiempo, y mucho menos la razón, atendiendo al clima social y a la situación política. En mis años de Facultad me enseñaron que la Justicia ha de ser, en todo momento, garante del Estado de Derecho y lo demás son gaitas marineras, ganas de incordiar y afán de alcanzar extraños y personales objetivos.

Cuando se hable de la seriedad de la Justicia, el ciudadano recordará actuaciones como las que hemos presenciado con Grande-Marlaska. Otras formas de trabajo quedarán en la anécdota y posiblemente para el chiste vespertino de taberna. Mientras que el Gobierno encuentra aliados y cooperadores cercanos a la banda etarra, con la seriedad del estilo laboral de Grande-MarlasKa el ciudadano se siente protegido. Se ha ganado el reconocimiento social y ha inyectado seguridad donde reinaba angustia y preocupación.

Existe la sensación de que la Justicia se ha quitado la venda y mira de reojo a la política. Nadie esconde ya la bandera de la sospecha, gana terreno la inseguridad general y pierde la seguridad ciudadana. Flaco favor el que han hecho a la sociedad dos miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Ni siquiera el “juez estrella” suele estar seguro de sus resoluciones, por cuanto amenaza con tirar la piedra, pero sin soltarla de la mano. Algo así como “que me miren, pero que no me vean”.

Todos sabemos que para los gustos se hicieron los colores. Grande-Marlaska, refrendado por una impecable actividad y actuación judicial, deja “tan buen sabor de boca” que el ciudadano está convencido de que la aplicación de la ley sí es posible en toda su magnitud. A pesar del Gobierno de José Luís Rodríguez Zapatero, de la banda terrorista, de su entorno y de quienes colaboran con ellos para facilitarles el camino, Montesquieu no corre peligro y eso es un alivio.