“De la misma forma que hay personas incapaces de ser respetuosas con situaciones como esta crisis sanitaria, sí hay consistorios que anteponen ese respeto y saber estar a consignas políticas y otras memeces, paparruchas o pazguaterías”, en palabras de Jesús Salamanca Alonso.
Por Jesús Salamanca Alonso / Frente a consignas partidistas incomprensibles, SÍ hay Consistorios que hacen gala de la ética, el sentido común y la perfecta convivencia con la ciudadanía que los ha dado su confianza. Muestra de ello es el consistorio portillano. Ahí tienen las banderas a media asta en su balconada (Ver fotos). Tanto alcalde como concejales merecen un reconocimiento de saber hacer y estar. Con actitudes como ésta es como la gente se gana el respeto ajeno y la confianza.
Poner las banderas a media asta en las instituciones es un símbolo de respeto, duelo y sentimiento. Pero esa no ha sido la tónica de todos los consistorios: ahí tienen el ejemplo de Tomelloso, más conocido ya como el “Wuhan de la Mancha”, donde su alcaldesa ha hecho un ridículo sonado por su irreverente falta de respeto, subiendo vídeos a Internet: en ellos aparece bailando, precisamente en un pueblo donde hay 159 muertos por la “peste china”. Ni que decir tiene que se ha llevado la del pulpo en las redes por su desprecio a los convecinos fallecidos.
Sigue leyendo