“Por muy benévolas que sean las leyes en este caso –que lo son en exceso—no deja de ser un insulto al Estado de Derecho, una mofa a la ciudadanía que se ampara en las leyes y un atentado al sentido común”.
Por Jesús Salamanca Alonso / Ha sido una afrenta la presencia del terrorismo golpista para recoger las actas y para la constitución parlamentaria. Por muy benévolas que sean las leyes en este caso –que lo son en exceso—no deja de ser un insulto al Estado de Derecho, una mofa a la ciudadanía que se ampara en las leyes y un atentado al sentido común. Y si a ello añadimos cómo presumen de haber volteado al Estado de Derecho, entonces sí que ha de ampliarse su responsabilidad delictiva. Sinceramente, no me imagino a Adolfo Suárez felicitando a Antonio Tejero por su intento de subvertir la democracia que nos dimos los españoles o por su entrada “a lo elefante en cacharrería” en aquel 23F.