Esperanza Aguirre da muestras de cobardía y solo reducirá 2.000 liberados de los sindicatos obreros. Ni se atreve a acabar con ellos ni desea ayuda del exterior. Se ha puesto mirando a Cuenca y espera que la den.
Aguirre consideró que «aquí las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado tienen la misión de garantizar los derechos y libertades de todos, de los que quieren hacer huelga y de los que no». «Da la impresión que los sindicatos creen que los derechos y libertades de los ciudadanos decaen cuando ellos hacen huelga», añadió Aguirre y aclaró que «no prevalece» un derecho sobre otro.
La presidenta madrileña señaló además que «los piquetes informativos en el siglo XXI no son necesarios, nadie necesita que le informen» y lamentó que a diferencia de otros países los sindicatos españoles no se hayan modernizado. (Esradio)
NOTA.- Cualquier agresión, asesinato o incidente de envergadura puede ser el fin de tanto vago, sinvergüenza y socialista o comunista descontrolado.