Varios miles de personas participaron en la manifestación convocada en Madrid y varias ciudades mas por la recién creada Plataforma contra la Impunidad del Franquismo en apoyo al juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, pidiendo la «justicia universal» cuando en realidad lo que pretenden «es poder tomarse la ley por su mano», reinstaurando las checas de hace tres cuartos de siglo, dando al mismo tiempo un paso más a la presión a los jueces del Tribunal Supremo que le juzgarán a Garzón por tres querellas por prevaricación.
Los que se manifestaron eran unos pocos supervivientes del drama de la Guerra Civil, aquejados de enfermedades de la memoria, añorando aquellos años de ruina y enfrentamiento, que ya no saben dónde están, manipulados arteramente por otros que ni siquiera tienen los años necesarios para haber conocido la Segunda República, que fue la causa de una dictadura con la que vivieron ricamente y que simplemente están defendiendo sus prebendas actuales y temen que se les acabe el poder seguir viviendo sin trabajar y del cuento guerracivilista.
Allí estuvieron los habituales de la pancarta, como el secretario de Movimientos Sociales y ONG del PSOE, Pedro Zerolo; los miembros de IU, Cayo Lara, Gaspar Llamazares, Gregorio Gordo y José Luis Centella; la inevitable Almudena Grandes, así como los actores José Sacristán y Pilar Bardem, entre otros. Marcos Ana fue quien cerró la lectura del manifiesto y afirmó que «los crímenes contra la humanidad no pueden ser amnistiados y no prescriben jamás», al tiempo que sostenía que «la Ley de Amnistía de 1977, preconstitucional, no puede prevalecer sobre la propia Constitución, ni sobre los convenios en materia de derechos humanos», pese a que él mismo cometió asesinatos políticos durante la guerra civil.
A toda esta gente les importa un comino la suerte del juez y solo lo llevan de estandarte en sus pancartas, con el fin de arremeter contra todo aquello que suene a amnistía, trabajo, reconciliación, justicia, y especialmente, contra lo que ellos consideran que es la derecha de este país. Ellos se están olvidando voluntariamente del presente y el negro futuro que nos depara la gestión revanchista y sectaria de Jose Luis Rodríguez Zapatero, que es quien los está animando y financiando con el dinero de nuestros impuestos, para que no se hable de crisis.