Archivo diario: 14 junio, 2007

Castilla y León: Trabajo serio en educación

jesus1.JPG Jesús Salamanca guisasola1.jpg A. Guisasola

La Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León, en colaboración con el Ministerio de Educación y Ciencia, se ha propuesto impulsar la formación profesional, con el fin de lograr una relación precisa entre la actual demanda del alumnado que cursa estas enseñanzas y la inserción laboral real de las distintas familias profesionales. El hecho de que colaboren las Cámaras de Comercio y numerosas entidades empresariales, además del propio MEC, pone de manifiesto que la cuestión va en serio, por lo que hay que felicitar al consejero Francisco Javier Álvarez Guisasola; a cada uno lo suyo, aunque suene a pedantería, admiración o colaboracionismo. En este caso, nunca más lejos de la realidad; máxime, cuando ha recibido las críticas que ha merecido en temas no suficientemente tratados, aprovechados o resueltos.

Actualmente existe un importante desajuste entre la demanda empresarial y la oferta formativa de la Consejería. Ese desajuste requiere un tratamiento preciso, urgente y sin más demora. Existe una clara inclinación hacia unas familias profesionales, mientras hay un evidente rechazo hacia otras. Más que rechazo es, simplemente, una falta de demanda. Lo curioso del caso es que aquellas ofertas formativas que tienen menos demanda son las que aportan con más facilidad un puesto de trabajo. Éste es un dato repetido desde hace varios años y que, con ligeros cambios, se ha mantenido hasta hoy. No hay más que ver el Anuario Estadístico, las estadísticas de la Junta de Castilla y León, las correspondientes al Ministerio de Educación y Ciencia y las propias de algunos centros educativos que realizan seguimiento a su alumnado, una vez finalizados los estudios correspondientes.

Insisto en que las que menos demanda tienen son las que posibilitan mayor integración laboral. Es una ‘cantinela’ completamente cierta y en la que se viene insistiendo desde la propia Dirección General de Formación Profesional e Innovación Educativa. Casi siempre presentan los mismos datos, mismos inconvenientes y los mismos problemas, lo que ha hecho que la ciudadanía deje de prestar atención a razonamientos excesivamente repetitivos. Pero no hay que dejarse llevar solo por los datos, sino que sigue siendo fundamental aquello de “obras son amores”.

En este momento el consejero de educación progresa adecuadamente. No hay lugar para poner en duda la impecable actuación del actual consejero de educación – aunque parece que los méritos intentan colgárselos otras personas de inferior nivel en la estructura jerárquica de la Consejería –. Una prueba de ello son las medidas a realizar que se recogen en el convenio de colaboración, en materia de formación profesional, entre Castilla y León y SAGE SP, S.A., firmado hace un año aproximadamente. Dichas actuaciones tienen como base los cursos de formación dirigidos al profesorado de la comunidad que imparte algunos de los ciclos formativos pertenecientes a las familias profesionales de Comercio y Marketing y Administración.

Nadie pone en duda la estructuración de la formación profesional en Castilla y León. Durante los últimos ocho años se ha configurado una estructura digna de tener en cuenta, aunque se hayan abandonado otros aspectos del sistema educativo, como la educación de personas adultas, la educación a distancia, imprecisión de los ámbitos territoriales de EPA en muchas provincias, tardío y absurdo Reglamento Orgánico de Centros, convenios entre la Junta e Instituciones Penitenciarias y la creación de centro propio en este tipo de instituciones -– caso de la comunidad de Madrid y Navarra –, cuyo profesorado fue transferido a la Junta y a quien se le ha dejado de lado, por absurda dejadez, desconocimiento de los responsables de la Consejería y temor a afrontar las nuevas situaciones surgidas tras la asunción de competencias educativas.

Mentiras y deslealtad del M.E.C.

perio5.jpg Jesús Salamanca merche-cabrera.jpg M. Cabrera

No nos llamemos a engaño. No nos vamos a poner a la altura del País Vasco o Navarra en un sin fin de temas que afectan al propio sistema educativo. En estos momentos, las comunidades citadas sí son ‘bandera’ a seguir en el ámbito educativo, por sus planes de mejora, su investigación y desarrollo, iniciativa pública y privada, además de por su envidiable inversión.

No todo es tan sencillo en el ámbito educativo. También hay infinidad de complicaciones, ‘desamores’, engaños y zancadillas. De ahí que el ínclito consejero de educación de Castilla y León, Francisco Javier Álvarez Guisasola, haya acusado al Ministerio de Educación y Ciencia de deslealtad con las comunidades. Tal deslealtad es mayor aún en las comunidades gobernadas por cuadros del partido Popular. Lo vemos en muchos temas de calado y es fruto de la inseguridad manifiesta del propio Ministerio de Educación y Ciencia y de su situación ante muchas comunidades autónomas y en muchos temas de calado. Esa situación es la de ser vagón de cola, con pocas perspectivas de ganar posiciones, cuando debería ser locomotora educativa para todas ellas, tanto las gobernadas por el PP como aquellas donde el PSOE ha logrado formar gobierno.

La actual ministra de educación, Mercedes Cabrera, “se ha pasado tres pueblos”. Y el consejero de educación de Castilla y León — sabe más el diablo por viejo que por diablo, dicho sea con todo el respeto — le ha dicho que es desleal con las comunidades autónomas y, a la vez, le ha llamado mentirosa, dado que el Gobierno ha remitido comunicado a la Junta acusándola de haber esperado a la víspera electoral para dar a conocer el desarrollo de los currículos de la Ley Orgánica de Educación.

La Ley Orgánica de Calidad Educativa (LOCE) -– eliminada por el MEC socialista tan pronto como llegó al poder -– fue más lógica y minuciosa al planificar una clara temporalización, cosa que no ha hecho la Ley Orgánica de Educación (LOE). Así, la LOCE contemplaba hasta quince meses para que las comunidades presentaran los desarrollos curriculares, en tanto que la LOE plantea que se elaboren en cinco. Al parecer el MEC prefiere el trabajo atropellado al trabajo sensato y planificado.

El Ministerio de la señora Cabrera sigue diciendo verdades a medias, como asegura Álvarez Guisasola; ya que no cumple el calendario previsto. Después de haber analizado con minuciosidad sus declaraciones, comprobamos que es cierto cuanto asegura el consejero, puesto que los decretos que deberían haberse publicado antes de terminar el año 2006, según la ley, se han publicado en 2007. Otra cuestión es el decreto regulador del bachillerato, del que aún nada se sabe, excepto del borrador que ‘levantó en armas’ a la población, a las asociaciones y a la ciudadanía responsable. Asunto que también ha soliviantado al ínclito consejero, por lo que ha invitado a la ministra Cabrera a que “sea diligente y publique el decreto de bachillerato”, en vez de mentir constantemente y tergiversar la realidad.

Y como parece que lo de mentir va por barrios, si bien el presidente Rodríguez lleva a todos bastante ventaja, dejaremos para otro momento las medias verdades de la Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León, en temas de educación de personas adultas, educación a distancia, formación del profesorado, atención a la diversidad, sustituciones al profesorado, incumplimiento de la orden sobre permisos durante las campañas electorales, manifiesta descoordinación entre provincias y de éstas con los servicios centrales,… Temas, entre otros, donde nos hemos quedado a mitad de camino respecto a otras comunidades autónomas, aunque se nos pinten las paredes de color de conveniencia.