Lo sabíamos. Había que ser muy torpe para pensar que se firmaría el Pacto por la Educación. Mientras el socialismo nos trajo la LOGSE — que tanto daño ha hecho a la sociedad en los últimos veinte años — el PP sacó adelante con torpeza la famosa LOCE. Esta última no llegó a desarrollarse, porque era una mala copia de la LOGSE, aunque añadía conceptos como el trabajo, el sacrificio y el esfuerzo. Fueron muchas las comunidades autónomas que cayeron en la trampa.
Mal los socialistas y mal los facinerosos del PP. La educación está donde está y, si sale adelante, es por el buen hacer del profesorado y por el sacrificio diario del mejor pilar de las Consejerías de Educación: el profesorado. Lo demás son milongas y ganas de tocar la pera a destiempo. Dice el refranero que «hay muchos buenos hombres que son unos malos bichos».