Durante la tarde del sábado me han llamado tres amigos que estudian en Washington y uno que está realizando la tesis doctoral en Ankara. Todos ellos han aprovechado la ocasión para tomarme cariñosamente el pelo con la fotografía de los Obama y los Rodríguez, sin olvidar el impacto y la falta de protocolo al presentar en escena a las niñas ‘góticas’ del presidente.