Una vez que se ha descubierto que Hacienda tiene la caja vacía, no entendemos cómo piensa pagar el Gobierno de Zapatero las promesas que ha hecho a la población. Para no dispersar excesivamente la atención, podemos centrarnos únicamente en las que se refieren a educación. Por cierto, son muchas y de mucho coste.
En teoría, los profesionales de la docencia ven con buenos ojos las medidas anunciadas por el presidente del Gobierno. Es evidente que todo lo que redunde en beneficio de la docencia no puede acogerse negativamente. A corto, medio y largo plazo siempre sale beneficiada la sociedad a la que afecta.