Los encierros camperos de Portillo son de los que más y mejor fama tienen en nuestra región. Hace mucho tiempo que se celebran y suponen un extraordianrio atractivo para visitantes y lugareños. Datan de la época celtibérica-prerromana, momento en que NIVARIA era el nombre del actual Portillo, 1º Distrito (como hemos dicho en otro sitio, estamos pendientes de documentar estos encierros con anterioridad al siglo X). Durante muchos años se celebraron con vacas y posteriormente se prohibieron, celebrándose exclusivamente por las calles.
Desde primeras horas de la mañana el trayecto del encierro y aledaños comienzan a tomar colorido. Los más madrugadores se acercan al corral del “Comeso”, donde está encerrado el ganado bravo. Desde un par de horas antes, las tapias del corral están abarrotadas de jóvenes que han madrugado o empalmado con el día anterior.
Quienes solo pretenden ver el encierro o participar cuando llega la manada al pueblo, ocupan el cerro donde está el enclave del primer distrito; otros se reparten por el tramo de carretera de Segovia que atraviesa el pueblo; muchos pueblan los alrededores de la gasolinera, junto a la ermita del Santo Cristo,… entre todos aportan ese colorido especial que requieren los festejos taurinos propios de esta zona y del estío.