«Después de los Visigodos y visigodas tendrán que citar a los almorávides y almorávidas, los almohades y claro… las almohadas… ¿no?»
En esto se gasta el presupuesto educativo. La educación les importa un pimiento, solo el adoctrinamiento y las nuevas políticas del absurdo.
Luego tendrán que citar a los almorávides y almorávidas, los almohades y claro… las almohadas… ¿no?
Sin olvidarnos de la invasión de los suevos y suevas, vándalos y vándalas, alanos y alanas, los bárbaros y las bárbaras… ¡Ah! que se me olvidaban los moriscos y moriscas además de los conversos y conversas…
Esto es lo único que se les ocurre a socialistas y socialistos, y demás cargos públicos y cargas públicas.
¡Definitivo, no cabe un tonto más!