“En otras ocasiones contestan con evasivas, retorciendo el collar del galgo o simplemente diciendo que lo están estudiando”.
Por Jesús Salamanca Alonso / Algunas veces hemos hablado del silencio y del desprecio a la ciudadanía por parte de la Junta de Castilla y León, sobre todo en temas de educación. Ésta es una cuestión que no interesa a los políticos porque no genera intereses a corto plazo. Ya pueden estar cayendo chuzos de punta sobre los centros educativos que, mientras a los altos cargos les siga cayendo la guita y el momio, la Consejería de Educación pasa de ello. En invierno, mientras en los centros educativos se pasa más frío que en vendimia, en las consejerías no hay quien esté de calor. Ya saben aquello de “yo esté caliente y ríase la gente”. Es el tipo de bueyes con lo que la sociedad está arando. Lo curioso de todo es que, a pesar de las quejas y cabreos, llegan las elecciones y siguen votando a los mismos. En vez de botarlos se limitan a votarlos. ¡Así nos cubre el pelo!
Parece ser que, mientras a ellos no les afecte, todo marcha bien. Y lo peor de todo es que al actuar así, las cuestiones importantes nunca llegan al presidente, Juan Vicente, de ahí que éste piense que todo marcha sobre ruedas en Castilla y León. Como prueba de esa dejadez, desprecio y silencio al que arriba nos referíamos, plasmamos en este post una carta recibida de la directora del Gabinete del Presidente de la Junta de Castilla y León. Sigue leyendo