Es urgente que ese colectivo ucraniano abra los ojos y vea cómo esta gente de la extrema izquierda española también representa la extrema beligerancia, el odio y la venganza.
Por Jesús Salamanca Alonso / La extrema izquierda solo mira a Rusia, defienden al genocida más loco y degenerado del siglo XXI, incluso en la medida de lo posible impiden que otros lleven ayuda humanitaria o de otro tipo a Ucrania. Hoy, por encima de todo, España debe volcarse –y lo está haciendo—con Ucrania y con la población ucraniana por encima de todo.
Ante la guerra del enloquecido Putin, la inmigración musulmana debe pasar a segundo o tercer plano: todas las reservas deben destinarse a las víctimas de la guerra en exclusiva. Poco a poco aprenderemos la diferencia entre inmigrantes por necesidad y por la guerra e inmigración mafiosa e ilegal, que es la procedente de Marruecos, con la colaboración mafiosa de sospechosas ONG. Sigue leyendo