El odio mostrado por el radicalismo de izquierdas y el mal periodismo evidenciado por varios medios de comunicación, pone de manifiesto la podredumbre de un sector de la sociedad española.
Por Jesús Salamanca Alonso / Hoy es un hecho que la presión de algunos malignos medios de comunicación y de la despreciable izquierda radical se ha llevado por medio a Rita Barberá. No hay duda de ello y, si alguien la tiene, que eche una mirada a cierta prensa o a algunos canales de TV. Es vergonzoso escuchar lo que hemos tenido que escuchar. Hay ciertas expresiones que ni al peor enemigo se le achacan.
A algunas personas que lideran formaciones dictatoriales que se les ha llenado la boca con lo de la corrupción, como es el caso del hipócrita y cansino bolivariano, Pablo Iglesias; antes o después le va a pillar la artesa, no lo duden. De momento ya se le ha visto el plumero, por lo que está perdiendo votos a chorro. Tanto él como su ‘manada’ lo saben. Sí, manada, digo bien, esta gente ac0mplejada se mueve como los animales cuando precisan defensa, bien por sentirse inseguros o bien porque son incapaces de resolver situaciones en solitario. Sigue leyendo