Archivo diario: 7 julio, 2016

Incapaces de ganarse el respeto

En los actuales líderes políticos prima la contradicción y el egoísmo personal.

Candidatos

Por Jesús Salamanca Alonso / Han pasado las segundas elecciones generales para formar Gobierno en España y continúa la misma incertidumbre que antes de celebrarse. Tras las primeras, se demostró la nula capacidad de entendimiento de los líderes políticos y su falta de preparación democrática: incapaces de hablar, nulos para acordar y desconcertados para regir los destino de un país elegante como España; sin duda, lo menos elegante es esta ‘tropa’ desorientada, excesivamente ambiciosa, muy interesada en sus cuestiones y nada por las de la ciudadanía. En Europa ya somos el hazmerreír.

Lo sorprendente es que haya acudido tanta gente a votar. Decepción tras decepción y los más siguen tropezando en las mismas piedras que, dicho sea de paso, están en los mismos sitios. Nada que ver la categoría política de la época de Aznar, Felipe González, Alfonso Guerra, Adolfo Suárez,… Hoy, los que se hacen llamar líderes políticos, no les llegan a los tobillos; en ellos prima la contradicción y el egoísmo personal. Precisamente por eso se les ha perdido el respeto; recuerden aquello de que “cuando los que mandan, pierden la vergüenza, los que obedecen, pierden el respeto». Sigue leyendo

Nigel Farage, “Ahí os quedáis”

“Nigel Farage se ha convertido en el ‘capitán araña’ de Gran Bretaña: embarcó a todos y ahora se tira del barco”.

Nigel Farage, el 'capitán araña' de Gran Bretaña.

Por Xavier Carrió / A estas alturas las consecuencias del Brexit son impredecibles. David Cameron intentó unir la dualidad de los Conservadores respecto a Europa ratificando la posición del Reino Unido en la UE con un referéndum. A día de hoy, decir que al primer ministo le ha salido el tiro por la culata es ser demasiado benevolente: el Reino Unido se enfrenta a una tormenta perfecta, a su mayor crisis política y social desde la II Guerra Mundial, tal y como viene asegurando el diario ‘The Guardian’ en esta última semana.
Horas después de que se conociese el resultado del referéndum sobre la salida británica de la Unión Europea, el Primer Ministro británico David Cameron anunciaba su dimisión. Según dijo, no podía ser el patrón del Reino Unido en este nuevo rumbo que el país había tomado tras la victoria del Brexit. Boris Johnson, aparentemente el gran beneficiado político del abandono de la UE, sorprendió a propios y extraños al comunicar, ante una cascada de flashes, que no optaría a liderar a los conservadores. Boris, tirando de su particular histrionismo, renunciaba a sustituir al Primer Ministro saliente. De la noche a la mañana, el político más ambicioso del país daba un paso atrás en todas sus aspiraciones de poder. Y ahora, Nigel Farage, el gran abanderado del Brexit, dice que quiere recuperar su vida y que deja el liderazgo del UKIP.