La izquierda extrema nunca ha llevado progreso y prosperidad a los países donde ha tocado poder; más bien los ha arruinado y dividido
Por Jesús Salamanca / Otro día hablaremos de los usos oscuros de Ciudadanos y de la desconfianza que genera, pero hoy toca incidir en que el peligro para nuestros ahorros viene de esa izquierda radical, absurda, trasnochada y cavernícola, más propia de retroceso y descomposición que de otra cosa. Están muy lejos de ser fuerzas de progreso. La izquierda extrema nunca ha llevado progreso y prosperidad a los países donde ha tocado poder; más bien los ha arruinado y dividido a la población: miren a Grecia, Venezuela, Bolivia, Argentina, Brasil,…