Las corruptelas de Caja España-Duero con las subordinadas y preferentes han dejado tocadas a estas entidades que aparecen tras el logo de “EspañaDuero”, dentro de Unicaja.
Por Jesús Salamanca Alonso / Casi siempre, cuando se habla de corrupción o de presuntas corruptelas, se habla de personas y algunas veces de organismos y de instituciones, pero se suelen olvidar las entidades privadas; sin duda en éstas también hay corrupción y mucha. Lo más triste es que a veces está teñida de legalidad, como ha sucedido con las dietas que recibían los miembros del Consejo de Administración de lo que fue Caja España-Duero Por ejemplos: Bankia. Bien es verdad que esta entidad está haciendo lo que nunca ha hecho ninguna: reintegrar a los accionistas las cantidades invertidas a cambio de que devuelvan las acciones, añadiendo unos intereses, además de un 1% anual.
Esa medida no han sabido aplicarla otras entidades. Y también ponemos un ejemplo: Caja España-Duero; hoy está absorbida por Unicaja, entidad malagueña. La entidad andaluza, como no fue responsable en su momento, mira al tendido. Su egoísmo es mayor aún cuando se decide vender el patrimonio de Caja España-Duero, excepto la Casa Botín. Si quieren saber cuál es lo más doloroso, hay que decir que el dinero de esa venta irá a Andalucía. Una vez más, Castilla y León se quedará a verlas venir y a dejarlas pasar. ¡Qué vergüenza!
