Ya saben ustedes que se empieza por un cambalache y se acaba en el terreno de la corrupción.
Por Jesús Salamanca Alonso / La administración educativa en Castilla y León sigue pasándose por el arco del triunfo la opinión del profesorado y de los sindicatos docentes. ¡Como para votar a Mariano Rajoy y a su gente con estos mimbres y con estos atropellos! Año tras año han pasado del profesorado y de la ciudadanía y ahora está pagando esa mala política y sus malas artes. ¡Ni un voto más para Rajoy ni para el PP!
Hoy voy a contarles a ustedes cómo se mofan del profesorado desde las Direcciones Provinciales de Educación en el momento que llega el proceso de negociación de plantillas. En algunos centros –como sucede en el ámbito de la educación de personas adultas han destrozado las plantillas por completo, y eso solo es achacable a la deficiente planificación y cómputo por parte de la Inspección Educativa de turno—ha hecho el PP más daño que un nublado en el mes de julio. ¡Y encima se ríen del resultado! Como decía ayer un alto cargo del Partido Popular: “¡Malditos sinvergüenzas. Están haciendo pagar a justos por pecadores!”.