Zapatero expuso esta cifra en la cumbre empresarial organizada en Seúl antes de comenzar la reunión del G-20, un foro en el que presidió una mesa redonda bajo el lema de «Crecimiento verde». Ya tenemos otro titulillo.
En esa mesa, en la que también participaron los presidentes de Repsol, Antonio Brufau; Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, y Acciona, José Manuel Entrecanales, los grandes favorecidos por las estas inversiones destacaron el diálogo abierto por el Gobierno con partidos y empresas para alcanzar un acuerdo en política energética para la próxima década que permita un modelo sostenible «con un mínimo coste para los consumidores». (?) Una gran falacia marcada por el interés de estas empresas, ya que son exclusivamente ellos los que están recibiendo las generosas subvenciones que vienen directamente del Gobierno y el plus que paga el consumidor por estas energías que supera un 30 % de la factura de la luz.
Zapatero, en su fantasía repetitiva, aseguró que el sector de las energías renovables, el transporte, la edificación sostenible y la ecoindustria tienen en España un potencial de creación de un millón de puestos de trabajo en los próximos diez años. Esto no se lo cree ni él. Un dato: las dos únicas empresas que fabricaban placas fotovoltaicas en España están cerradas por falta de rentabilidad debiendo de importarse estos componentes de China o Estados Unidos.
«Es un acuerdo decisivo para nuestro país y debe ser, si lo logramos, un buen modelo para el conjunto de los países de la OCDE; traerá importantes beneficios en términos de estabilidad regulatoria, de favorecer la inversión y de aportar un impulso de nueva tecnología e innovación al conjunto del sistema», según el dijo. Como es natural la propuesta del campeón mundial del paro ha sido acogida con sonrisas por parte de los asistentes a la reunión.
Hay que añadir que cada «empleo verde» ha necesitado subvenciones por valor de 571.138 euros entre 2000 y 2008, de modo que, cada puesto de trabajo creado en España en el sector de las renovables ha destruido un promedio de 2,2 empleos en el resto de la economía.
Esta claro que el resto de los asistentes van a tener reticencias para seguir las pautas marcadas por el fracasado Zapatero, visto los nefastos resultados de su política económica que sufre nuestro país. ¿La tierra es del viento?…. Más bien…. Lo que el viento se llevó.