(Artículo publicado en este Blog el 20.09.2007)
Estos días se está hablando en todos los medios de comunicación de la actitud GAFE y de mal fario que acompaña al presidente del Gobierno, José Luís Rodríguez Zapatero. Si recurren a PERIODISTA DIGITAL y a otros medios de comunicación pueden comprobarlo.
Son muchos los datos que avalan que el presidente Rodríguez es un gafe mediático del que huyen sus propios correligionarios y los presidentes de algunos Gobiernos europeos, hasta el punto de haberse convertido en el hazmerreír de muchos de ellos. Otros, como Sarkozy y Ángela Merkel cruzan los dedos siempre que se sitúan cerca de él, situación que procuran evitar por todos los medios.
Son secretos de alcoba que se escapan tras un buen vino y un mejor canapé. Pero no hace falta ir lejos para comprobar lo que decimos: cuentan en León que no es ningún secreto el gafe que le acompaña desde que dirigía los destinos del partido socialista en la provincia. Y van más allá: alguno de sus allegados suele contar que un alto cargo socialista de la comunidad de Castilla y León sospechaba ese mal fario de la cercanía de Rodríguez Zapatero tras varios y llamativos episodios, como ir con el actual presidente y recibir dos deyecciones de paloma en el barrio húmedo de León, tropezar con el bordillo y golpearse con la farola en una visita a Valencia de Don Juan u olvidarse dos veces la billetera en uno de los bares junto a la catedral leonesa.
Pero ahí no acaban las ‘historietas’ que se cuentan del presidente. Un personaje desconocido que llega al Gobierno tras el tenebroso atentado del 11-M y que es capaz de revitalizar a la banda ETA en el momento en que todos la dan casi por extinguida, hace sospechar en demasía. Pero hay más datos, como podréis comprobar.
En 2006 Rodríguez inauguró el curso político en Rodiezno. A partir de la fecha de inauguración empezaron los problemas con los topillos en Castilla y León y diversos problemas de corrupción dentro del partido socialista.
El 5 de septiembre de 2007 el euríbor estaba al 4,81 %. El porcentaje más alto en los últimos años, hasta ese momento. Ese mismo día anunció que el Gobierno ayudaría a los jóvenes a comprar una vivienda dada su carestía y, a partir de ahí, bajó el euríbor; es más, a fecha 19 de octubre, se encontraba en el 4,63%, dato que en nada favorecía a la gran mayoría de los españoles que veían cómo sus ahorros no se rentabilizan. Solo se favorecía a los que estaban pagando vivienda.
Habrá que esperar a las próximas declaraciones presidenciales para comprobar que todo sucede al revés de como lo expone. ¿Alguien se acuerda de las declaraciones del día antes del atentado de Barajas? Pues eso. Ahora mismo España tiembla con el anuncio de Zapatero de acudir a Viena a presenciar la final de la Eurocopa. Alguien del Gobierno debería hacerle ver la realidad. Su presencia no es grata, ni para los dirigentes europeos, ni para los aficionados españoles, ni para los ‘eurofifos’ y, posiblemente, tampoco para los jugadores que conocen el mal fario del presidente. Nunca un gafe había hecho tanto daño desde que se descubrió el mal fario que representaba Luís Yánez.
De todo lo negativo que acompaña a Rodríguez pueden hablar Ségolène Royal, Ángela Merkel, John Ferry, José Bono, Blair, Rafael Simancas, Miguel Sebastián, Ángel Villalba, López Aguilar, Romano Prodi, Soraya Rodríguez, Schröder, Javier León de la Riva, los trabajadores del AVE,… y un sinfín de personas que tras recibir el apoyo del presidente se han desmoronado de una u otra forma o han visto frustradas sus perspectivas de futuro.
Hasta la selección española de baloncesto sufrió el negativo maleficio del inquilino de la Moncloa. Nos cuentan que dos de sus ministros han llegado a santiguarse a escondidas, tras cruzarse con el jefe por los pasillos del Congreso de los Diputados.
Incluso, los jugadores del F. C. Barcelona temían que intentara acudir al estadio con motivo de algún partido de Champion League. En más de una ocasión, suelen acudir varios líderes de ERC al palco del campo del Barcelona para ahuyentar la intención de Zapatero de acudir a ver algún partido; no son suposiciones, sino declaraciones de varios políticos de ERC. En fin, éramos pocos y surgió Rodríguez Zapatero.
Lo que su Gobierno no ha conseguido en cuatro años, la selección española lo ha logrado en apenas un par de semanas: unir a los españoles en un objetivo común. Tan solo tres y el del bombo andan descarriados, y no es precisamente Manolo.