Celestino Corbacho se ha vuelto loco de atar. Sigue las consignas ‘zapateriles’ al pie de la letra sin pararse a reflexionar lo más mínimo. Lo que no entendemos es cuál es su intención al afirmar que el presidente Zapatero — líder del paro, la torpeza, la dejadez y de la recesión en Europa — va a ser “el que ponga luz en el túnel de la crisis económica y financiera que sufre Europa”. No hay duda que el señor ministro de Trabajo e Inmigración va muy sobrado de ignorancia, estupideces y mediocridades.
No hay un solo presidente de Gobierno de Europa que crea en Zapatero. Ni siquiera se fían de él, como se demostró el otro día en el Teatro Real. El propio Van Rompuy se pronunció en dirección contraria a las propuestas de Zapatero y la presidenta alemana se ha mofado del discurso socialista del presidente español. Está claro que no hay vez que no haga el ridículo el presidente Rodríguez; da lo mismo que esté en España que en el extranjero.
En la presentación de la UE le han sobrado barbaridades respecto al paro, creación de empleo, cumplimiento de objetivos, sanción por el no cumplimiento de los mismos, Cuba,… Lo que toca Zapatero lo desbarata. No solo ha aumentado la crispación entre los españoles, sino que ha agudizado la división entre ellos con sandeces políticas del tipo del aborto, la Ley de la Memoria ‘Histérica’, el ridículo de Afganistán, su pronunciamiento infantil sobre la energía nuclear, la cobarde huida del ejército en Irak, las centenas de asesores riéndose del propio presidente, la fallida reforma fiscal, la incapacidad para abordar la reforma laboral,…
Nadie entiende que con el 21% de paro salga Celestino Corbacho a los medios de comunicación a notificar la teoría del absurdo. Tan insensata ha sido su intervención como insensato ha sido el planteamiento de la ministra de Cultura, Angelita González-‘SINDEscargas’ o acertado el premio de “Borrica 2009” y “Tonta Contemporánea” para Bibiana Aído.
“La tasa de desempleo en España es mayor que en Europa debido al desarrollo de la economía de los últimos veinte años», ha dicho Corbacho. Ni siquiera se ha inmutado y mucho menos reflexionado sobre lo que ha dicho. Ello es una prueba de la ignorancia que acompaña a este Gobierno de Rodríguez Zapatero; sin duda el Gobierno más pobre intelectualmente y menos preparado de la democracia, como consecuencia de llegar como llegó al poder y de incluir en el mismo a personajes cuota, alejados de la formación integral que debe tener un ministro o ministro y siempre dados a alardear de insensateces que nunca redundan en beneficio de la ciudadanía.
Para completar el ridículo, Celestino Corbacho ha ensalzado la labor de los sindicatos. Es lo que nos faltaba por oír, después de llevar varios años aguantando y comprobando cómo esos se ponen del lado del Gobierno y en contra de la clase trabajadora. No nos cabe la menor duda que la ignorancia es muy atrevida y, a la vez, dañina. Hasta Corbacho alardea de ella sin saberlo. Decía C. Bini que “quien no sabe gobernar es siempre un usurpador”. Y de ello hay muchos en el circense Gobierno socialista de España.