«Mientras este estúpido, Celestino Corbacho, ministro aborregado y corrupto ex alcalde, dilapida lo que no tiene, ahí tienen el ejemplo de Cáritas española. Para quitarse el sombrero en toda su actuación y en su digno criterio ejemplificador.Mientras la Iglesia católica se vuelca con los más pobres y necesitados, el Gobierno socialista reparte dinero entre los países con represión socialista y pobreza entre los ciudadanos españoles.
En el caso de Celestino es como para darle de bofetadas hasta la extenuación y para correrle a gorrazos.Ha pretendido silenciar a Cáritas en cuanto se refiere a canalizar las ayudas a Irak. Lo ha hecho por envidia y por ignorancia, conociendo que Cáritas en sus distintas variantes parroquiales recauda el doble de lo que recaudan entre todos los chiringuitos retro-progres afines al socialismo represor y al ‘tonto contemporáneo’.
¡Se merece el desprecio generalizado de la población, sin discursos y sin contemplaciones! A cada borrego hay que darle y decirle lo que se merece. Y Celestino ni siquiera merece el pan que come».
* FUENTE: Juan y Verdad.