Frente a V.A.S.A., en dirección a Laguna de Duero, nos encontramnos con este bache de una cuarta de profundidad y ochenta centímetros de diámetro. Lleva camino de convertirse en un cráter y ya es un peligro para los conductores y los vehículos. No es fácil de salvar y una maniobra para dejarlo de lado puede convertirse en trampa mortal. ¿Responsable de esta chapuza? Hasta ahora nadie.
Como ven, es el mismo bache, aunque tomado con zoom. Su profundidad es de escándalo, como decimos más arriba. Más bien parece una trampa para topillos. Cualquier conductor despistado hace el día desde el punto de vista económico.
Aprovechamos a denunciar aquí que ese cráter lleva varios meses. Todos nos quejamos, pero nadie hace nada. Acabaremos arreglándolo a escote entre los contribuyentes, pues parece ser que los Ayuntamientos están hartos de atender a los ciudadanos.
El ciudadano es ciudadano durante la campaña electoral; el resto de la legislatura es un estorbo que, a veces, se convierte en mosca cojonera. «¡Hay que joderse con los ciudadanos, siempre están pidiendo. Cada vez más se parecen a los obreros: quieren cobrar todos los meses», como dice un director general de la Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León!