En dos días, a partir de 30/11/1936, un ejército de protoetarras gudaris, con una superioridad de 10 a 1, sobre la exigua castellana guarnición de VillarReal (Álava), no fue capaz de batirles mientras el grueso de las fuerzas españolas y católicas intentaban tomar Madrid. Por supuesto que los líderes gudaris, achacaron el espantoso fracaso de su ofensiva a la falta de aviación (mentira añadida, que sí tuvieron aviación soviética apoyándoles, mientras que los españoles no).
Entre abril y junio de 1937, con inferioridad numérica nacional de 5 frente a 6, los castellanos y españoles se llevaron por delante a los gudaris enrocados en Vizcaya y con apoyo inglés y ruso desde el Cantábrico, entrando victoriosos en Bilbao el 19/6/1937 y haciendo huir cobardemente a los gudaris hacia Santander, más allá de Balmaseda, dejando intacta toda la industria siderometalúrgica a Franco y su victorioso ejército español y católico, ante el que el cinturón de hierro quedó fundido. Ni siquiera ganaron los antiespañoles gudaris la batalla de la fábula propagandística de Guernica y sus menos de 130 muertos.
En agosto de 1937, los gudaris abrieron al CTV fascista italiano de Mussolini, sin luchar ni pegar un solo tiro, el camino a Santander, pues para ellos, la guerra había terminado tras perder Vizcaya, traicionando y entregando miserablemente a los rojos de Asturias y Santander, pactando huir por el Cantábrico en barcos extranjeros, haciendo un espectáculo mundial de cobardía y traición, incluso frente a sus propios aliados rojos, en la localidad santanderina de Santoña, la gran «proeza» antiespañola vasca, que no de los españoles como Blas de Lezo, Juan Sebastián Elcano, Zumalacarregui, Unamuno, etc.
Y entre estas y otras muchas «hazañas» de los gudaris del PNV protoetarra, los españoles durante más de un siglo, siquiera les han brindado al menos un mínimo de atención, lo cual les escuece aún más que todo lo anterior. Ni siquiera se les ha odiado, se les ha ignorado por completo, como si un león pasase al lado de una ardilla aullándole desafiante desde cierta distancia.
Hakenkreuz en NTVESPANA/ Con respecto al retrasado mental de Sabino Arana (y su hermano Luis no le iba a la zaga), insultando a los castellanos (que ni se han dado por aludidos), bien conviene recordar que en la hora de la verdad, a la hora de los hechos, cuando había que demostrar valentía y hombría de verdad, es importante recordarlos a esos gudaris del siglo XXI, valientes para pegar tiros en la nuca a guardias civiles desprevenidos y poner bombas bajo coches policiales y militares, o en casas cuartel asesinando niños durmiendo, lo siguiente:
En septiembre de 1936 fueron batidos a tiros en aplastante inferioridad por esos castellanos y españoles cristianos verdaderos en toda la provincia de Guipúzcoa en tan solo 15 días de ofensiva.