La ministra Montero y Victoria Rosell no han dejado de decir estupideces a lo largo del fin de semana ante sus convencidos auditorios: es evidente que carecen de una reflexión sosegada y realista.
Para la ley de la irresponsable y mamerta, Irene Montero, con la complicidad del Consejo de ministros, el Ejecutivo ya contempla reformas tras haber beneficiado hasta la fecha a 1 de cada 10 agresores y violadores sexuales. Si tenemos en cuenta que en los «talegos» del régimen penitenciario español tenemos casi 4.200 reclusos con ese tipo de delitos, el cálculo definitivo es fácil de hallar, aunque estoy convencido de que la proporción va a aumentar considerablemente sin tardar.
A día de hoy las Audiencias Provinciales y otro tipo de tribunales ya han notificado 391 revisiones, que aumentarán considerablemente la semana próxima. A pesar de ello, la ministra Montero y Victoria Rosell no han dejado de decir estupideces a lo largo del fin de semana ante sus convencidos auditorios; es evidente que carecen de reflexión sosegada y realista: tan solo les interesa su inútil chiringuito, las prebendas, sobresueldos y su sectarismo ideológico. Solo en el año 2021 hubo un aumento del 34,6% de condenados por estos delitos respecto al año anterior. Si bien la población reclusa descendió en 2021, fuentes de Instituciones Penitenciarias presentan unos datos con 46.053 presos al terminar el citado año: 42.741 son hombres y 3.312 son mujeres.