Por Diego Armario / COSAS DE UNA BAILARINA / José Luis Rodríguez Zapatero ha decidido echarle una mano a Sánchez y es posible que ese gesto sea una señal de esperanza porque no hay síntoma más preocupante que una persona ociosa, acostumbrada a crear problemas se postule para resolver un conflicto. Su sonrisa congelada en un rictus es la imagen de su inanidad, pero ahí sigue en el único escenario en el que puede hacer algo acorde con sus cualidades.
Zapatero – al que Carlos Herrera llamaba Rodríguez para situarlo en el grupo de los hombres grises – durante su mandato hizo tres cosas buenas ( la creación de la Unidad Militar de Emergencias, la ley der matrimonio homosexual y la ley antitabaco ), pronunció dos frases que pretendía que sonasen a poesía , como aquella en la que dijo que “la tierra no es de nadie salvo del viento”, y el resto del tiempo lo dedicó a dividir a los españoles entre los buenos , que eran los que le votaban ,y los fachas que éramos el resto. Sigue leyendo