–¡Hay que ver qué mala es la envidia!…Y la peor, la de la familia.
-Que una parejita, con el sudor de sus partes nobles, acumule en poco tiempo una fortunita y además se asegure un ”buen pasar” para el futuro, es muy propio de espíritus esforzados, aunque hay que reconocer que costar, cuesta.
-A muchos les llama la atención…
-La inmensa totalidad de sus votantes, trabajando toda su puta vida, no lo consigue.