Archivo diario: 11 junio, 2020

Stalin y la gallina

“Stalin explicó que exactamente así es el pueblo, hay que crearle problemas, llevarlo al límite, ponerlo de rodillas y después darles unos pocos granos, que sientan que tú eres el único que les puede salvar y te amarán…”

El pueblo comunista es como la gallina a la que tanto hizo sufrir Stalin.

Ver _FUENTE / Después del triunfo de la revolución en Rusia, una vez que los Zares y su familia habían sido asesinados y tras la muerte de Lenin, Stalin pudo hacerse por completo del poder en Rusia, era amo y señor, no había quien le hiciera sombra, sus decisiones eran indiscutibles, seguidas al pie de la letra por todos, propios y extraños. 

Con el poder total, el dictador decretó una serie de medidas que buscaban afianzar la revolución y el modelo soviético que tenía como eje una economía centralizada, el uni partidismo y una sociedad cooperativista, con un control total de los medios de comunicación, sin propiedad privada y sobre todo el culto a la personalidad del líder, todo ello con el objetivo de provocar un crecimiento que hiciera de la URSS una gran potencia industrial y así teóricamente mejorar la vida de los rusos. Sigue leyendo

¡Aló, Presidente Sánchez! (y VI)

“Los conocimientos de aritmética del presidente Sánchez son como su tesis doctoral”

F. Javier León de la Riva, ínclito alcalde de Valladolid durante 20 años. Sin duda, los más fructíferos de Valladolid desde el inicio de la democracia.

Por Javier León de la Riva* /   Cuando al caer la noche del pasado sábado, y no aparecer en las televisiones el Fraudillo Sánchez para soltarnos su homilía semanal, y pensábamos que había concluido su sarta de mentiras, nos encontramos que el domingo, después de su decimotercera conferencia con los presidentes ( y presidentas) de las CCA, invadió nuevamente nuestros hogares a hora de máxima audiencia, aunque para ello tuviera que cargarse los telediarios… pero quien manda, manda.
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                  Y a pesar de las protestas familiares, tuve una vez más la paciencia de intentar seguir su perorata, aunque he de confesar que con menor atención que otras veces. Y es que estas comparecencias, además de larguísimas son cansinas: el compareciente se limita a leer un discurso que le ha preparado Ivan Redondo, que no se cree ni él, y eso se le nota cuando lo lee. Y si en su última comparecencia insistió en ensalzar la tarea del ministro Illa y el licenciado Simón, ante las que se le pueden venir encima en los tribunales si la Fiscal Lola no lo remedia, pero en este caso hubo un par de detalles que me llamaron especialmente la atención:

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