El infectólogo Oriol Mitjà, que lidera un ensayo para cortar la transmisión del microorganismo, reclama responsabilidades por “la falta de previsión” en la gestión de la crisis.
EL_PAÍS / Mitjà, que lleva semanas estudiando el avance de la pandemia y advirtiendo del elevado riesgo de transmisión, se ha convertido en el azote, no solo de virus y bacterias, sino también de los gestores sanitarios que han pilotado la crisis del coronavirus. En Twitter ha pedido la dimisión del comité de emergencia español. El médico atiende a EL PAÍS desde su centro de operaciones, en las instalaciones del hospital Germans Trias i Pujol. Todo, por supuesto, vía móvil y Skype, para reducir el contacto al mínimo -solo unas fotografías- y predicar con el ejemplo. Las medidas de aislamiento social reducen los contagios, insiste.