Ahora resulta que usted miente hasta debajo del agua y es experto en el tema. Me molestan, sabe usted, los catedráticos de la estupidez.
Por Jesús Salamanca Alonso / Debe saber, señor Sánchez, que es muy fácil plagiar aunque no sé por qué se lo digo. Lo ha comprobado y parece que le ha gustado, siendo consciente de ello. No por casualidad ha ocultado su plagiada tesis que, dicho sea de paso, era una inutilidad desde el punto de vista académico, ético, didáctico e investigador. Las circunstancias han hecho que ya no sea suficiente con publicar su tesis y ponerla a disposición del mundo académico y de la ciudadanía. Cualquier tesis doctoral debe servir para innovar y aportar algo nuevo y la suya no reúne esas exigencias. Debe convocar elecciones y marcharse. España no se merece un presidente tan burdo, torticero, colérico y amenazador. Ha mentido y es rehén de su pasado.
No tiene más salida que dar urgentes explicaciones. El tiempo se le ha echado encima. El plagio lo cometió en 2012 y ahora le ha explotado en la cara. Ya sabe, señor plagiador, que la mentira tiene las patitas cortas, tan cortas que solo la ha podido ocultar seis años. Durante este tiempo, a muchos nos la ha negado el departamento de comunicación de la universidad; mejor dicho, no nos la ha negado sino que en tres ocasiones nos ha dado la callada como respuesta. Pero le han pillado, amigo, y lo han hecho en el peor momento. Si no recuerdo mal, llamó “indecente” al señor Rajoy y, mira por dónde, la indecencia la llevaba usted encima desde hace años. Usted es rehén de su pasado y lo es porque ha mentido.