Leído en ElCorreo.com / Desde que los resultados del informe PISA se conocieron el pasado martes, responsables educativos, profesores, padres y expertos miran con envidia a Castilla y León. Les gustaría asomarse por la ventana de uno de sus colegios y espiar cuál es ese método que ha aupado a los alumnos de la comunidad vecina al primer puesto del ranking de la excelencia académica. ¿Qué verían? Se sorprenderían por la sencillez de su apuesta en las aulas, que la directora de Innovación Educativa y Equidad del Gobierno castellanoleonés, Pilar González, detalla a EL CORREO. Un sistema que ha centrado sus esfuerzos en la lectura y las matemáticas. Todos los profesores de cualquier asignatura trabajan con una amplia bibliografía, y los alumnos que suspenden van a ‘clases de éxito’ –así las llaman– de Lengua y Matemáticas por las tardes y en el mes de julio. Y una larga lista de iniciativas que les ha colocado al nivel de Singapur, Canadá, Finlandia o Corea del Sur.
Los responsables educativos de la Junta de Castilla y León dedican la parte del currículo que se deja en manos de los gobiernos autónomos a reforzar castellano y Matemáticas. Pero no ahora, sino desde hace más de una década. Primero evaluaron a sus alumnos, detectaron sus carencias y decidieron elevar las horas semanales de esas materias en 2002, y lo volvieron a hacer en 2004, hasta convertirse en una de las comunidades con más clases de esas dos asignaturas troncales.