Como puede ver en el gráfico anterior, el Ibex 35 lleva describiendo una tendencia bajista desde abril del año pasado, cuando alcanzó su nivel máximo desde el estallido de la crisis al alcanzar los 11.800 puntos.
Desde estos máximos hasta el 11 de febrero cuando marcó su mínimo anual en los 7.800 puntos, el Ibex se dejó un 34 por ciento. Las dudas sobre el crecimiento económico mundial y sobre todo la incertidumbre política se cebaron con el selectivo español.
Sin embargo, fue en febrero cuando comenzó una tímida recuperación que le ha llevado al Ibex 35 a situarse por encima de los 9.000 puntos brevemente, nivel que ha luchado por superar durante las últimas semanas.
La primera vez que esta recuperación chocó con la línea de tendencia bajista fue a finales de abril, desde donde retrocedió un 5 por ciento para volver a la línea de tendencia alcista.
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