“Siendo Ignacio F. Candela el más leído en la columna de opinión de El Imparcial, han sido reducidas sus colaboraciones a una por quincena. Algo huele a podrido en El Imparcial”, en palabras de Jesús Salamanca.
Ignacio Fernández Candela
Por Jesús Salamanca Alonso / Hoy descubro que mi buen amigo, Ignacio Fernández Candela, ha escrito en El Imparcial más de cien columnas. Esto no es sorprendente en él, más bien al contrario. Lo que sí me ha sorprendido es que lo ha hecho de forma gratuita; es decir, no ha cobrado ni un solo euro. ¡Cómo se aprovechan algunos! ¡Hay que joderse para no caerse! ¿Y Luis Mª Ansón en qué balcón está subido que, como siempre, se aleja de los ‘circos’ de sus periódicos? ¡Ay, si levantara la cabeza don Emilio Romero, a cuántos correría a gorrazos!
Lo que también me sorprende es que un tal Antonio Biondini, yerno rebelde de José Mª Ruiz-Mateos, se ha dedicado presuntamente a malmeter contra Ignacio F. Candela al periódico digital, El Imparcial. Sospecho que dicho diario ha hecho caso a quien no debe (su director sabrá por qué) y cuentan las malas lenguas de Moncloa que, siendo Ignacio el más leído en la columna de opinión de El Imparcial, han sido reducidas sus colaboraciones a una por quincena. Si esa es la política periodística de ese diario,….¡con su pan se lo coma!
No me extraña que en Moncloa se hayan propuesto poner en práctica la política del palo y la zanahoria con El Imparcial. Sinceramente, no se merece otra cosa.
¡Y todo por hacer caso, presuntamente, al tal Biondini que tiene menos credibilidad que un concejal socialista en campaña electoral¡ En fin, empieza a olerme mal eso de “imparcial”, pero muy mal y de forma demasiado continuada.
