Por Jesús Salamanca Alonso / La Junta de Castilla y León sigue sacando pecho cuando habla de los programas educativos, en tanto que el PSOE ataca esas salidas de tono por el lado de la falta de igualdad de oportunidades y, por otra parte, Izquierda Unida –que casi siempre habla a destiempo y con un claro desconocimiento de los temas— se apunta a mensajes tercermundistas, a la vez que todo lo ve negro con una perspectiva catastrofista, por no decir otros adjetivos que le son más adecuados.
Eso nos da una idea de por dónde irá la campaña electoral. Parece que, una vez más, en vez de construir se van a dedicar a cultivar el “y tú más”. No aprenderán. Lo curioso de la situación es que el Gobierno de Herrera Campo tiene muchos flancos abiertos por su dejadez, falta de planificación y nula perspectiva. Nos engañan hasta con el informe PISA. Y eso que no hablamos de la represión que algunos intentan con poco éxito.
Si el PSOE e IU quieren hacer una campaña fructífera y explicando lo sucedido en los dos últimos años, lo tienen a placer. No hay más que echar una ojeada a la sanidad y a los recortes aplicados en ella, las tremendas deficiencias en muchos centros de salud, la falta de especialistas y las ocultas y exageradas listas de espera, por citar algunos. Pero no se trata de arrojar ideas a la cara, así sin más, hay que saberlas explicar. Y si se dan nombres, pues mejor, ya sean de personas, situaciones o localidades. Es tan poca la credibilidad que ofrece en PSOE en la comunidad y la nula capacidad de liderazgo que el desencanto parece haber tocado techo.
También el flanco educativo está muy flojo. Estos políticos de región han aprendido de sus mayores y juegan con los vocablos para que se les entienda menos. Fíjense ustedes: recientemente, el presunto líder el PSOE en Castilla y León hablaba de recortes educativos y, para referirse a eso mismo, el presidente del Gobierno regional lo llamaba ajustes. Sinceramente, toman por tontos y por estúpidos a los ciudadanos. A las pruebas me remito.
Cuando Oscar López echaba en cara a Herrera Campo el recorte de 680 millones de euros en programas educativos en dos años y el desvío de 290 millones de la enseñanza pública a la privada, el presidente contestaba diciendo que se habían aplicado ajustes en el sistema educativo. Ya han empezado a jugar con los votantes. Estos políticos que nos sitúan a los ciudadanos en el plano de “indigentes intelectuales” deben empezar a pagar cuanto antes. Las elecciones europeas puede ser un buen punto de inflexión, antes de que vuelvan a engañarnos. No hay derecho. Se han instalado en la falta de ética y carecen de un mínimo de dignidad. ¡Con su pan se lo coman, porque dudo que puedan aprovecharse de muchos votos!
La campaña ha comenzado para ellos. Si hay que mentir, se miente; siempre les ha pintado bien, así que ¿por qué no seguir en la misma línea? Pero muchos mítines no los podrán celebrar. ¿Apostamos? Al tiempo. Ellos saben que son el principal problema para la ciudadanía.
