Cualquiera diría que es el anagrama de la Junta de Castilla y León.
¿Para qué permitir a los funcionarios el acceso a todos los medios de comunicación si pueden estar perfectamente ‘informados’ con Intereconomía? Esta es la pregunta que parece que se hizo la persona responsable de que todos los funcionarios de la Junta de Castilla y León sólo tengan acceso, desde la Intranet de la administración regional, a esta cadena de televisión ultra conservadora, según denuncia el colectivo de funcionarios de Burgos que integran el movimiento ‘Viernes Negro’.
Este grupo de funcionarios, que mañana viernes recogerá firmas para adjuntar esta denuncia al presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, pidiéndole una investigación al respecto, explica en un comunicado que “actualmente en toda la Comunidad el acceso a Internet se hace de forma restringida para la mayoría de los empleados públicos, a través de una Intranet, dándose la paradoja de que cuerpos de inspección, técnicos, abogados, algunos jefes de Sección, gestores de solicitudes online…, solamente disponen de Internet abierto para algunas páginas, lo que limita sus posibilidades de ser más eficientes y ágiles en sus actividades”.
Las restricciones de las que habla ‘Viernes Negro’, afectan, como es lógico, a páginas de pornografía, juegos de azar… Pero lo sorprendente es que en el listado de páginas de acceso básico, en las que aparecen distintos grupos de páginas relacionadas con servicios financieros, de educación, teleformación, hay un apartado de “otras” en las que sólo figura un medio de comunicación que no es otro que Intereconomía.com. Ningún medio de comunicación local ni regional aparece en ese listado de páginas “permitidas”.
Preguntas sin respuesta
“Cuando la Dirección General de la Función Pública intenta cumplir con la función asignada de ‘la adaptación a los nuevos métodos y herramientas de gestión’, ¿a qué se refiere? ¿A la limitación de Internet a los empleados públicos para que éstos sean menos ágiles y efectivos en sus cometidos y no puedan servir con la suficiente objetividad e imparcialidad a los ciudadanos? ¿A intentar influir y moldear la opinión de los empleados públicos al facilitarles una única página Web de medios de comunicación? ¿A despreciar la mínima ética seleccionando con absoluto dirigismo qué se pone al alcance de los empleados públicos de la Junta de Castilla y León, maleando el incumplimiento del Código Ético de los Empleados públicos? Cuando la Junta habla de transparencia y al Sr. Herrera se le llena la boca con el Anteproyecto de Ley de Transparencia y Gobierno Abierto, ¿a que se refiere? ¿A la difusión, en exclusiva, de las premisas sectarias de un medio de comunicación? ¿A la censura del resto de medios de comunicación? ¿A la falta de información y contestación permanente a las preguntas planteadas por los empleados públicos de esta Administración?”, son algunas de las preguntas que con evidente sorna incluyen en su carta-denuncia al presidente Herrera.
Antecedentes
Aunque parezca mentira o un simple error, esta situación no es nueva, según recuerda el colectivo ‘Viernes Negro’. El 21 de Julio de 2010 una empleada pública de la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en Burgos generó una incidencia al Centro de Atención a Usuarios de Informática exponiendo lo siguiente: “He visto que, aunque no aparece en ningún listado de permisos, tenemos todos, incluso los que tenemos permisos restringidos, acceso a la pagina Web de Intereconomia (www.intereconomia.com) por lo que entiendo que ese tipo de paginas esta permitido. Me gustaría también tener acceso a las paginas Web de los demás medios de comunicación o, al menos, de los de ámbito nacional y regional mas importantes”.
El movimiento de funcionarios relata que esta incidencia fue cancelada, aunque a raíz de ella “en vez de abrir el acceso a las webs de los demás medios de comunicación lo que se hizo fue cerrar también el de Intereconomía”.
