Dos aclaraciones: 1.- En los tiempos que corren es un privilegio trabajar y 2.-La huelga de autobuses en Valladolid está haciendo mucho daño. Tiene que reaccionar el alcalde cuanto antes. No se entiende que, con la capacidad de gestión y de trabajo que tiene León de la Riva, se permita hacer el gamberro a los conductores de autobuses, de las 7 a las 9 de la mañana.
Mucha gente depende del autobús para acudir a su puesto de trabajo y no tiene otro medio para desplazarse (o sencillamente no quiere poner su coche a disposición de la empresa), hasta el punto que le están descontando a diario por llegar tarde. ¿Es eso un servicio público? ¿Es ésta la protección que tenemos de nuestro Ayuntamiento? ¿Por qué solo se preocupan los conductores de autobús de hacer daño a la población? Si quieren protestar, que se sienten a la puerta de la empresa durante días y noches, pero no vamos a permitir que dañen el nombre de la ciudad ni a sus ciudadanos. Y a todo esto, el PSOE de la ciudad ‘abanicándose con el rabo’ con lentitud e ineficacia, como siempre.