Por Ignacio F. Candela.- «Los antecedentes prácticos que han burlado el orden constitucional y la propia democracia; la calma por unas resoluciones que aparentemente dan al traste con planes evidentes de pactos secretos; los satélites nacionalistas dando apoyo a formaciones filoetarras cuyas listas son descabalgadas de las elecciones; los intereses del PNV con el radicalismo independentista y los de zETAp buscando el apoyo para gobernar de los mal llamados nacionalistas moderados… son factores incidentes que nos aconsejan no cantar victoria demasiado pronto.
El PP ya ha condicionado su profunda satisfacción a una maniobra con la que no se da zanjada la problemática de evitar la presencia de ETA en las instituciones… siempre tan histriónicamente confiados. La coalición con EA y Alternatiba no coló pese a los seis vendidos con toga pretendiendo dar por legal lo injustificable. Eta-Batasuna no tendrá un tercer plan de cara a la galería después de Sortu y Bildu, pero seguramente que estas vicisitudes no serán inconveniente para llevar a cabo el plan oculto que recurra, una vez más, a la criminal tomadura de pelo que escenifican la banda terrorista y zETAp.
Atentos al prestidigitador que se sacará un nuevo conejo de la chistera y la desvergüenza por la manga. La escenificación del truco aún no ha acabado.Los ritmos y los tiempos de estos oscurantistas cómplices no son los mismos por los que pretendemos guiarnos los demócratas. Lo que está claro es que las negociaciones secretas hoy se han endurecido un poco más y me temo que, con estas contrariedades, lo terminaremos pagando la inmensa mayoría de los españoles.»