Rápidamente los medios de comunicación se han hecho eco de los rumores que situan fueran de nuestra Región a la nueva “Super-Caja” surgida de la unión de Caja España y Caja Duero (antigua Caja Salamanca y Soria). Sale de Castilla y León para situarse en Madrid o Málaga, de forma que, poco a poco, Castilla y León continua perdiendo su tejido financiero.
Meses atrás León, Salamanca o Valladolid venían disputándose por tener un trozo de pastel de la nueva “SuperCaja Regional”, tanto se lo han disputado que al final llega Unicaja y se lleva la sede fuera de Castilla y León, y es que “muerto el perro se acabó la rabia”. Triste realidad, cuando si se hubiese situado en cualquiera de nuestras nueve provincias hubiese sido un éxito no sólo para una, sino para las nueve, pues contribuiría a fortalecer el tejido financiero regional, con las consecuencias positivas que de ello se derivarían para todos los sectores. Más lógico hubiese sido que todos hubiésemos luchado en la misma dirección, que se quedase en Castilla y León, en Soria, en Palencia o en Zamora (pues falta les haría), es lo de menos, pero en nuestra Región, pues se trata de nuestros ahorros.
En Castilla y León seguimos perdiendo trenes, las Cajas regionales bien de dos en dos o de forma individual se van adentrando en otros grupos ajenos a esta tierra, pensando erróneamente en aquello de “mejor cabeza de ratón que cola de león”. ¡Qué fuerza tendría Castilla y León si todas las Cajas se hubiesen integrado en una única Caja! Cuando ya no nos quede nada propio en esta tierra nos arrepentiremos de no haber sabido potenciar y defender lo que teníamos, aunque también podremos seguir como hacen algunos, echar la culpa a los demás de lo que nosotros elegimos cada cuatro años en las urnas.
Albano de Manuel Betegón, Candidato a la alcaldía de Valladolid por URCyL.