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El Gobierno por boca de Alfredo Pérez Rubalcaba nos ha sorprendido hoy con el anuncio de un plan de ahorro energético para hacer frente a la subida de los precios del petróleo. El ministro de
l Interior ha dicho que cada subida de 10 euros en el barril son 6.000 millones al año o 500 millones mensuales y ha anunciado algunas medidas como la reducción de la velocidad máxima en autopistas y autovías, medidas que son bastante inesperadas.
l Interior ha dicho que cada subida de 10 euros en el barril son 6.000 millones al año o 500 millones mensuales y ha anunciado algunas medidas como la reducción de la velocidad máxima en autopistas y autovías, medidas que son bastante inesperadas.A bote pronto, se me ocurren las siguientes reflexiones:
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El ahorro va a ser mínimo porque cuando más consume un automóvil es cuando va por la ciudad callejeando con la primera o segunda marcha.
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La quinta marcha va a ser innecesaria en todo tipo de coches para circular en autopistas y autovías ya que está pensada para ahorrar gasolina y mantener una velocidad de crucero que en la mayoría de coches está calculada para 130 o más km. por hora y así obtener un mayor ahorro de combustible.
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Tampoco por este hecho se reducirán los accidentes ya que obligarán a los conductores a actuar de manera artificial y estar pendientes en todo momento del velocímetro.
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Lo que ahorramos en gasolina vamos a gastarlo en señales de tráfico!!!!. Los únicos que salen ganando son los que hacen e instalan señales de tráfico, estamos hablando de unas 200.000 señales de limitación que existen en autovías y autopistas que se pretende solucionar con pegatinas porque además dicen que éstas medidas son transitorias, por lo que cuando esto acabe habrá que volver a poner nuevas señales con el consiguiente nuevo gasto.
Pero tengo la impresión de que este tipo de medidas polémicas es una nueva chapuza del Gobierno y sobre todo del Ministerio de Interior de Rubalcaba cuyo Director General de Trafico ni siquiera sabe conducir, creo que aparte de cosernos a multas, esconde un interés para que el personal no dedique mucho tiempo a fijarse en sus manejos en faisanes y otras tonterías.
Me creería todo esto si ahora mismo los miembros de este Gobierno y toda la clase política en general, dejaran los coches oficiales y realizaran sus desplazamientos en transporte público. Con esta medida el ahorro sí sería importante.
Estar gobernado por idiotas conlleva estos riesgos. Y si además éstos son malvados como yo supongo, la cosa se complica. Lo cierto es que están dispuestos a encabronar al personal dictando leyes absurdas y contra el sentido común. Un gobierno que tiene los bolsillos llenos de agujeros de malversar y regalar dinero de las arcas públicas a sus compinches, no tiene ninguna autoridad para obligarme a ahorrar un dinero de un combustible que yo pago de mi bolsillo a un buen precio.
