La famélica legión y los tres tenedores
Por Carmelo Jordá.- Poco importa que el 90% de los trabajadores a los que Cándido dice representar no se puedan permitir esas comidas de 100 euros por comensal con vinos de a 60 la botella, al fin y al cabo sus paladares deformados por los menús del día de los polígonos tampoco los apreciarían: los currantes de verdad, los que echan ocho o doce horas en el tajo y sólo tienen una o media para comer no pueden desarrollar el buen gusto que demuestra Méndez en su selección de favoritos: dim sum, steak tartar, crustáceos, mariscos, sushi…