He decidido tomarme un respiro en mis crónicas de la muerte anunciada de este país. Me voy a Ibiza a descansar unos días e intentaré no escribir en este blog durante unos cuantos días, hasta mi vuelta. Quiza entonces haya conseguido ahuyentar el enorme pesimismo que siento ahora mismo, al intentar explicar este desastre nacional, mientras contemplo impotente que nadie mueva un dedo para solucionarlo.
He tenido en muchos momentos la sensación de estar viajando dentro de un autobús, mirando por la ventanilla las simas que hay cientos de metros mas abajo, que es conducido por un loco que ha pegado su pie en el acelerador y ha decidido bajar a toda pastilla por la carretera más peligrosa y abrupta que uno pueda imaginar. Uno está esperando solo el momento de que se produzca el golpe final que acabe con la pesadilla.
Ayer el loco planetario hizo una gran exhibición de su doble personalidad en el Congreso ante los asombrados parlamentarios cuando enumeró sus logros durante la presidencia ¿o disidencia? española en la Comunidad Europea. Él quería que fuera un hito para Europa, y se había propuesto una serie de encuentros en la tercera fase con los más importantes de la tierra, en su proyecto de cambiar el mundo.
Lo cierto es que todo le salió mal, empezando por la reunión en la cumbre que quería celebrar en Madrid con Obama nada mas lejos de la realidad, el norteamericano se excusó con una avería en el gas de su casa. La de los países Mediterraneos, fue otro de los proyectos que tuvo que aplazar y solo pudo llevar a cabo la de los países Iberoamericanos y lograr que personajes como Evo Morales o la Kirchner vinieran a insultar a la Justicia española. Eso sí, consiguió que nuestra economía en la puta ruina fuera intervenida por la CEE, lo que aprovecho para culparles a ellos de la rebaja de sueldos a funcionarios o pensionistas y ayudas a dependientes y familias. Y ya vamos por los cinco millones de parados. Todo sea por permanecer en el poder y no admitir el fracaso.
Pero que nadie se preocupe…. aquí no se baja ni una décima del despilfarro generalizado en subvenciones, ayudas, coches oficiales, viajes, Fundaciones, Diputaciones, Veguerias, Comunidades Autonómas, Empresas mixtas etc……., La solución está a la mano de quien pueda. Mejor dicho, esto es…. sálvese quien pueda. Todo es cuestión de agarrarse a una de estas ubres de la abundancia y no soltarla de ninguna manera, aunque vaya en contra de los principios de cada uno y que este país se vaya a la mierda definitivamente.
Y Rodríguez Zapatero en el subidón de su esquizofrenia paranoide progresiva, culpó ayer de toda la responsabilidad de sus fracasos ante el Congreso de los Diputados a una oposición atenazada en sus escaños por la comodidad de tanto exceso, a la que acusó por no mojarse ante los problemas de este país.