El Ministerio de Educación ha ido dando bandazos desde que transfirió la educación a las comunidades autónomas. Ni siquiera ha sabido ser líder serio y riguroso, como se esperaba.
Tanto en los Gobiernos de la retardada derecha como en los de la confusa izquierda, el Ministerio no ha sabido ‘coger al toro por los cuernos’. Ahí tienen el ejemplo de Cataluña, País Vasco y Galicia, principalmente, donde durante años se ha denigrado la enseñanza en castellano, incumpliendo reiteradamente el mandato constitucional.